El agresor portaba un cuchillo y un cúter.
Un individuo golpea brutalmente en la cara a un policía en la estación de Alicante: portaba un cuchillo
La Policía denuncia esta nueva agresión a un compañero y exige medidas urgentes ante la falta de chalecos antibalas.
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La mañana del pasado viernes dejó un nuevo episodio de violencia contra las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en Alicante. Un agente de la Brigada Móvil fue agredido de manera brutal por un individuo en estado de gran alteración durante un servicio de vigilancia en la estación de tren, según un comunicado de la Policía.
El hombre propinó un fuerte puñetazo en el rostro del agente, lo derribó y llevaba encima un cuchillo y un cúter, tal y como recoge el atestado.
Para el sindicato mayoritario en el Consejo de la Policía Nacional (Jupol), el incidente vuelve a evidenciar un problema que lleva años denunciando: la escalada de agresiones contra policías y guardias civiles, que superaron las 17.000 el año pasado en España.
El sindicato incide en un aspecto que considera "de enorme gravedad": el agente no contaba con un chaleco antibalas individual en el momento de la agresión.
Ese detalle, subrayan, podría haber derivado en una tragedia si el atacante hubiese utilizado alguna de las armas blancas que portaba.
En la provincia de Alicante, más de 600 policías nacionales continúan sin chaleco de dotación personal, una situación que afecta también a varios integrantes de la Brigada Móvil, pese a tratarse de una unidad habituada a intervenir en entornos de gran conflictividad.
Un suministro "insuficiente"
Las críticas se dirigen de nuevo al Ministerio del Interior. JUPOL sostiene que las promesas de dotación de material no se han cumplido y que miles de agentes siguen dependiendo de chalecos colectivos, compartidos y, en muchos casos, deteriorados.
El sindicato recuerda que tanto la normativa europea como las recomendaciones internacionales establecen que cada policía debe contar con un chaleco adaptado a su talla y de uso exclusivo.
La agresión del viernes se suma a una cadena de episodios que, a juicio del sindicato, demuestran que la Policía Nacional trabaja sin las garantías mínimas.
No solo por la falta de equipamiento, sino también por la ausencia de reformas legales que incrementen la protección de los agentes ante agresiones o amenazas.
El colectivo acusa al Ministerio del Interior de actuar con irresponsabilidad al no dotar a todas las unidades operativas de chalecos individuales.
JUPOL ha convocado una concentración este miércoles, a las 12 del mediodía, frente a la Delegación del Gobierno en Valencia.
El acto rendirá homenaje a Carlos, el Policía Nacional asesinado en Vinalesa, y servirá para reclamar el reconocimiento de la profesión de riesgo, el fin de las agresiones constantes y la dotación inmediata de medios de protección.
"El Gobierno se niega a reconocernos como profesión de riesgo y a dotarnos de lo básico. No pedimos privilegios, pedimos sobrevivir", afirma el sindicato.
JUPOL anuncia que continuará presionando en el Consejo de Policía, el Parlamento y organismos europeos para garantizar que cada agente del país disponga de un chaleco antibalas propio.
Reclama medidas materiales, legislativas y jurídicas que frenen lo que consideran una escalada de violencia contra la Policía Nacional.