La Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Alicante ha condenado a cinco años de prisión por un delito de asesinato en grado de tentativa con la atenuante de reparación del daño a un hombre que intentó matar a otro atropellándolo con su coche en un barrio de la ciudad de Villena.

La Sala impone en la sentencia al penado la obligación de indemnizar a la víctima con 10.000 euros por las lesiones y con 5.000 por las secuelas sufridas a consecuencia del ataque. Al parecer, cuando la víctima estaba en el suelo el procesado bajó del vehículo y le golpeó. 

Los hechos sucedieron sobre el mediodía del 7 de febrero de 2022, cuando el condenado fue con su coche hasta una urbanización del barrio de San Francisco de Asís, en Villena, donde se encontraba la víctima.

[Una vecina de Elche intenta matar a su marido con unas tijeras tras discutir por una herencia]

Según el relato de hechos probados recogido en la resolución judicial, el conductor lanzó su vehículo contra el perjudicado, que se encontraba en la acera, y lo atropelló de forma repentina y violenta.

El hombre realizó esta conducta con la intención de acabar con la vida del agredido o siendo consciente de la alta probabilidad de acabar con ella.

A consecuencia del atropello, la víctima se fracturó siete costillas, el esternón y varias vértebras, entre otras lesiones, de las que tardó 120 días en curar.

Días antes al juicio, el condenado consignó 15.000 euros en el Juzgado cm la intención de destinar dicha cantidad al pago de la indemnización al perjudicado, por lo que el Tribunal le ha aplicado la atenuante de reparación del daño como muy cualificada.

La sentencia no es firme y se puede recurrir ante la Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana.

Los motivos

El acusado alegó en el juicio que la víctima había ido a pedirle a su mujer dinero para comprar droga, un extremo que la acusación negó en el juicio. Simplemente explicó que estaba en la calle cuando recibió el impacto del coche. 

También testificó que no tenía problemas con el acusado, pero que es probable que la agresión se produjese después de que éste le pidiese que abandonase una vivienda que había okupado y que pertenecía a un banco. 

El ahora condenado negó en todo momento que su intención fuese matar al hombre, y explicó que simplemente quería asustarlo y que se le fue el coche mientras daba un acelerón.