Miguel López, yerno de la víctima y principal sospechoso del crimen, que fue absuelto en 2019.

Miguel López, yerno de la víctima y principal sospechoso del crimen, que fue absuelto en 2019. EFE

Alicante

Caso Sala: los mil giros del asesinato de la viuda del expresidente de la CAM

La anulación de la repetición del juicio por parte del Tribunal Constitucional es el último episodio de un proceso con muchas preguntas sin respuesta.

27 abril, 2023 02:07
Alicante

El 9 de diciembre de 2016 un crimen conmocionó a toda la provincia de Alicante. María del Carmen Martínez, viuda del expresidente de la Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM) Vicente Sala, era asesinada a tiros en el lavadero del concesionario Novocar, propiedad de su familia. Había ido a recoger su Porsche Cayenne a última hora, sola, cuando en la oscuridad del garaje recibió dos tiros en al cabeza de un arma que nunca ha llegado a aparecer. Solo se sabe que la pistola que disparó tenía más de 100 años y usaba balas modificadas. 

La investigación que siguió fue digna de una temporada de Falcon Crest: se desvelaron conflictos familiares, intereses económicos y una guerra entre María del Carmen y su primogénito, Vicente Sala Martínez, por un lado, y sus otras tres hijas con sus cónyuges por otro. De hecho, el esposo de Fanny Sala y regente del concesionario donde se cometió el crimen, Miguel López, ha sido el principal sospechoso de haber orquestado el asesinato.

Los problemas en el clan de los Sala tienen su origen en la gestión de los negocios familiares, con un valor estimado de 120 millones de euros, y muy especialmente en la voluntad de la víctima de traspasar su "acción de oro" a su hijo varón, algo que le habría dado el control de las empresas en detrimento de sus tres hermanas. 

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El juicio contra López levantó una gran expectación. Duró 18 sesiones, aproximadamente un mes, y recogió las declaraciones de un centenar de testigos. Finalmente, en noviembre de 2019, el yerno de Mari Carmen fue declarado no culpable por un jurado popular, por seis votos contra tres.

La defensa de López había basado su estrategia (con éxito) en convencer al tribunal de que no se puede constituir un veredicto de culpabilidad sin pruebas directas, independientemente de que exista un abultado sumario lleno de pruebas indiciarias contra el acusado. 

Era público y notorio que la relación de López con la asesinada era muy distante. De hecho, ni se hablaban. Por eso extrañó tanto a los investigadores que la víctima recibiese las llaves de su coche, el que fue a recoger al concesionario, de manos de su propio yerno, cuando lo normal es que la hubiese atendido un empleado. 

Los agentes incluso creen que el acusado ensayó el crimen cuatro días antes, porque envió a un empleado a realizar tareas fuera del concesionario justo a la misma hora a la que volvió a ordenarle mover piezas de mobiliario el viernes 9 de diciembre, cuando se produjo el asesinato. La Policía dedujo que no quería testigos de lo que iba a suceder. 

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También se sabía que los hijos de Miguel López y Fanny Sala odiaban a su abuela, algo que incluso figura en el sumario. Hasta el punto de que el mayor llegó a colgar una foto en redes sociales en las que se podía leer la palabra "Jaque Mate" pocos días después del asesinato de Mari Carmen.

En las conversaciones intervenidas por los investigadores se puede escuchar a Miguel recriminarle a su hijo esa "gilipollez". "Tú estás mal de la cabeza. Eres un inmaduro". Pero eso no impidió que su hermano pequeño tuviese que declarar en el juicio en presencia de su madre, para explicar por qué había colgado en las redes sociales mensajes despectivos contra su abuela: "Decepcionado es la palabra, más falsa que tus putos bolsos".

Un crimen sin culpable

El primer gran giro de la historia vino precisamente con este veredicto. Se sabe que la presidenta del tribunal, la magistrada Francisca Bru, devolvió el primer fallo al jurado al considerar que había errores en la argumentación. Y no solo eso, sino que se destruyó el acta donde estaba recogida esta sentencia, en la que se consideraba al acusado culpable algo que ha servido para que el Tribunal Supremo ordene repetir el caso al considerar que se había vulnerado la tutela judicial efectiva del recurrente.

Desde entonces el procedimiento ha sido un laberinto de retrasos, muchas veces por cuestiones formales (como la recusación del magistrado del nuevo juicio por parte de la defensa) y otras coyunturales (la huelga de secretarios judiciales de principios de este año o incluso por no localizar a algunos de los miembros del nuevo jurado), pero parecía que ya había un horizonte claro para el juicio: entre los días 3 y 25 de mayo.

La sorpresa, sin embargo, se escribió este martes, cuando el Tribunal Constitucional aceptó el recurso de amparo Miguel López y ordenó suspender de urgencia el proceso. El motivo es que debe estudiar si, tal como alega el acusado, se está vulnerando su presunción de inocencia al ordenar repetir un juicio por causas totalmente ajenas al ejercicio de su defensa. 

Mientras tanto, el misterio sobre quién asesinó a Mari Carmen sigue sin resolverse casi siete años después de que fuese asesinada a tiros en el lavadero del concesionario de su familia. Y las preguntas siguen acumulándose sin respuesta a la espera de la acción judicial.