Los hoteles de Alicante tienen un "déficit aproximado" de 2.000 trabajadores de cara a la temporada alta, según las estimaciones en bruto de la patronal hotelera de Benidorm, Hosbec. Estos empleados suponen aproximadamente el 20% de las plantillas de la planta hotelera de la provincia, aquella que no estaba fija antes de que estallase la pandemia. 

En total se estima que los hoteles alicantinos emplean a unas 10.000 personas en diversos puestos, desde recepcionistas a camareras de piso. El convenio colectivo para las empresas grandes (más de diez trabajadores) estipula que un 72 % de las jornadas de esa plantilla tiene que ser fija, mientras que el resto normalmente se cubría con personal eventual.

Así, el personal de plantilla "se ha recuperado ya totalmente" tras la pandemia, y con ella se va a afrontar el primer gran periodo vacacional del año, Semana Santa, en el que se espera una ocupación superior al 80 %. Pero ahora "falta por ver cómo se ocupan el resto de puestos con las nuevas figuras previstas la reforma laboral" de cara a los periodos vacacionales más fuertes, en particular julio y agosto. 

Desde Hosbec explican que "a partir de un 75% de ocupación diaria la plantillas fija es insuficiente", por lo que se buscan a unos 2.000 empleados para la planta hotelera alicantina para los próximos meses. De hecho, ya se ha empezado a dar la situación de establecimientos con una alta ocupación que tienen "plantas vacías por no poder limpiarlas". 

Se trata de un problema que se ha replicado en muchos sectores relacionados con el turismo, especialmente la hostelería. El pasado mes de febrero la patronal de restaurantes de Benidormn, Abreca, cifraba en casi 4.000 trabajadores que necesitaba solo en la ciudad para los siguientes meses.

En Alicante, el chef César Anca, presidente de la patronal ARA, achacaba la falta de personal "en una provincia con tantos parados" a varios factores, como "la falta de formación específica o complementaria para desarrollar el oficio adecuadamente" y la percepción sociológica y cultural que se tiene de los camareros, que una buenta parte de la clase política (y especialmente en la Comunidad Valenciana) "lleva años criminalizando".

Los sindicatos también critican "las condiciones precarias" en los contratos de trabajo del sector, lo que ha hecho que se pierda mucha mano de obra durante la pandemia. De hecho, algunas fuentes empresariales apuntan a "una realidad que se vive en la provincia de Alicante: cuando el sector de la construcción sube, los trabajadores de la hostelería bajan. Y viceversa". 

Primera 'estación' con la planta al 90%

Por otra parte,, Hosbec informó este martes que la primera 'estación' de la Semana Santa, que es el primer fin de semana se ha saldado con resultados "moderadamente positivos" en la ocupación hotelera.

Hay que tener en cuenta que la planta abierta está en el 90% (todavía quedan hoteles cerrados por obras y reformas y algunos que aplazan sus operaciones a fechas más próximas al verano) y los resultados han sido "bastante similares en todas las zonas vacacionales de la Comunidad Valenciana, entre el 73% y el 76% mientras que Valencia marca el ritmo con el mejor dato con un 84%", informó el presidente de Hosbec, Toni Mayor.
 
El sector se prepara ahora para afrontar el periodo central de la Semana Santa, que va desde el Jueves Santo al Lunes de Pascua, periodo en el que "esperamos incrementar estos datos y estar en una horquilla entre el 80 y el 90% según zonas", indicó Mayor.  "El clima no está siendo demasiado favorable en estos momentos, pero a partir del jueves se espera sol y buenas temperaturas que animarán la actividad turística y la reserva de última hora".

Las viviendas turísticas se recuperan 

En cuanto a los apartamentos, el presidente de la patronal autonómica (Aptur), Miguel Ángel Sotillos, aseguró que las viviendas turísticas de la Comunidad Valenciana "van a recuperar dos años después del inicio de la pandemia un nivel medio de ocupación en Semana Santa del 90%". 

Las reservas hechas para esta semana en el llamado sector VUT oscilan entre el 85 % de las plazas alojativas del interior y la Costa Azahar de la provincia de Castellón, y el 95 % de los alojamientos de la ciudad de Valencia y la Costa Blanca de la provincia de Alicante.

Según estas fuentes, la Comunidad Valenciana, dos años después, volverá a competir con Andalucía en el ranking de los destinos elegidos por los turistas nacionales en Semana Santa, y recupera también el turismo internacional, aunque con niveles un 10% inferiores a los de la Semana Santa de 2019, como ocurre en otros destinos competidores como Canarias, Cataluña, Baleares o la propia región andaluza.

Benidorm es el destino de la Comunitat que lidera la llegada del turismo extranjero ya que más de la mitad de sus 6.500 apartamentos turísticos reglados están reservados esta semana por turistas, mayoritariamente, del mercado británico y alemán.

Sotillos ha recordado que las VUTs ya representan el 55% de la oferta alojativa de la Comunitat (hasta el 65% en la provincia de Alicante), y generan un impacto anual de más de 1.700 millones de euros que beneficia al conjunto de la economía de la Comunidad, y específicamente al comercio local minorista de las zonas en las que opera”.