Los jugadores del Deportivo de la Coruña celebran el ascenso a Segunda.

Los jugadores del Deportivo de la Coruña celebran el ascenso a Segunda. EFE

Fútbol

Las leyendas del Deportivo alzan la voz: “Hay que mostrar a los niños lo que fuimos para que tengan fe”

EL ESPAÑOL habla con Javier Irureta, icónico entrenador del club, y Manuel Pablo, una leyenda del equipo de Riazor, para analizar las claves del futuro del cuadro gallego.

14 mayo, 2024 10:00

Cuatro años. Eso es lo que ha durado una de las mayores pesadillas del Deportivo de La Coruña. Un club histórico en España, campeón de Liga y con presencia en Champions, al que le ha tocado vivir casi un lustro en el infierno del fútbol no profesional. Ahora, por fin, vuelve a sonreír. Y toda la afición deportivista lo hace con ellos.

Riazor echaba de menos un día como el que se vivió este pasado domingo 12 de mayo. Un duelo frenético ante el Barça B que finalizó con el ascenso del Depor a Segunda División. La vuelta al fútbol profesional de un equipo que no debería estar ahí.

La afición deportivista festejó a lo grande el ascenso de su equipo. Seguramente les hubiera gustado celebrar un hito mayor, pero la realidad del club es la que es y salir del infierno en el que está inmerso es lo más importante. 

[El Deportivo de La Coruña logra el ascenso a Segunda División y vuelve al fútbol profesional 4 años después]

Lo conseguido el domingo sirvió para dar el primer paso hacia una reconversión del Deportivo de toda la vida. A ver a un club capaz de imponerse a los más grandes y de poner su mapa en el mapa europeo. Javier Irureta y Manuel Pablo fueron dos figuras muy importantes en el mejor Depor de la historia y ahora hablan con EL ESPAÑOL para dar las claves sobre la situación y el devenir del club gallego.

Los pasos de la reconstrucción

Tanto Irureta como Manuel Pablo coinciden en que este ascenso es el primer paso hacia un nuevo Deportivo de La Coruña. "Subir a Segunda significa salir de una situación que estaba siendo una pesadilla para los aficionados y para el club. Este año se ha dado un cambio importante en cuanto a la gestión y la infraestructura del club y eso es positivo", apunta Manuel Pablo quien también hace énfasis en la "afición nos demuestra cariño siempre y cada año son más socios en el estadio".

Irureta quiso destacar también el papel de una afición que "está animada con el equipo y que nunca ha dejado de creer" y al que cree que ahora el club "tiene que devolver a Riazor al sitio que le corresponde".

Javier Irureta, durante su etapa como entrenador del Deportivo.

Javier Irureta, durante su etapa como entrenador del Deportivo. EFE

Ambos coinciden en que en el presente del club existe una simbiosis entre la afición y los jugadores, pero también están de acuerdo en que la reconstrucción del Depor de toda la vida lleva su tiempo.

"Para volver a ese Deportivo campeón se necesita mucho trabajo, estar encima de los jugadores y todos, y tener un poco de dinero. En el fútbol sin dinero es muy difícil estar en los primeros puestos de Liga. Es muy difícil sin estos ingredientes volver ahí arriba. Pero el Depor es capaz de ello, tiene fuerza estoy seguro que habrá mucha unión. Pero hace falta paciencia. Estar ahí apoyando al equipo, la directiva… Porque esto no se consigue de la noche a la mañana", apunta Javier Irureta.

La solución

No cabe duda que será un proceso largo. El curso que viene tendrán que batallar en el infierno de Segunda y no será fácil poder ascender a Primera División. Tiempo al tiempo, pero sin perderlo tampoco. De momento, tienen que ser los jóvenes de la cantera quienes den el primer paso.

Para Javier Irureta es muy importante palpar a los chicos de las categorías inferiores de la gran historia de su club, la cual no han conocido: "A los niños hay que mostrarles nuestra historia. Hemos vivido malas situaciones, pero nos hemos repuesto y hemos conseguido cosas muy grandes. No les contamos mentiras, el Depor ha competido con el Real Madrid y el Barça hace no tanto".

Según el entrenador vasco, el Deportivo tiene que utilizar la cantera para seguir creciendo, pero reconoce que hacen falta más cosas: "La cantera es importante siempre en todos los equipos. Ahora, el Depor deberá valerse de la cantera, pero para ser grande de nuevo también habrá que fichar de fuera. Estoy seguro que la cantera dará un impulso, pero para dar el siguiente paso harán falta también incorporaciones".

Parte de esa responsabilidad la tiene Manuel Pablo, entrenador del Juvenil del Deportivo. Su equipo ha firmado una gran temporada finalizando primero de su grupo y clasificándose a la Copa de Campeones de División de Honor donde están jugando los cuartos ante el Sevilla.

Manuel Pablo defiende en su libreto que la constancia es innegociable para poder llegar al primer equipo: "El mensaje que les doy a mis jugadores es que con las cualidades no es suficiente. Hay que tener constancia porque no todo es bonito y las cosas no son siempre positivas. Tienen que estar preparados para el reto", dice.

Manuel Pablo, durante un partido con el Deportivo

Manuel Pablo, durante un partido con el Deportivo

Ahora, a los canteranos del Depor les ha tocado vivir una situación delicada. Deben ser los líderes de un club con un peso gigante que está en horas bajas y eso puede pasarles factura. "No creo que la presión la tengan por esta razón. Siempre tienen presión y, más aún, en un equipo como el Deportivo con tanto seguimiento y tanta afición. La exigencia cada vez es mayor en los jóvenes jugadores y creo que lo correcto es intentar normalizarlo", añade Manuel Pablo.

De momento, lo que está claro es que el Deportivo de La Coruña parece haber dado el primer paso hacia la resurrección. Ahora conviene seguir dando los pasos adecuados para volver a ser el que era. Costará tiempo, no es nada fácil. Hay que tener paciencia.