Juanfran Pérez Llorca, durante su intervención en el Día de la Constitución Española. Efe / Borja Sánchez-Trillo

Juanfran Pérez Llorca, durante su intervención en el Día de la Constitución Española. Efe / Borja Sánchez-Trillo

Valencia

Las demandas de Pérez Llorca a Sánchez, que llevará la semana que viene a Moncloa: el desvío del Poyo, financiación, agua...

El presidente del Gobierno recibe al de la Generalitat tras rechazar durante 13 meses el encuentro que pedía Mazón para coordinar la dana.

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Todas las reivindicaciones asociadas a la dana, incluido el desvío del trágico barranco del Poyo. Pero también viejos problemas sin resolver como la infrafinanciación valenciana o la carencia de agua en la provincia de Alicante.

Son algunos de los grandes asuntos que pondrá sobre la mesa del presidente del Gobierno el recién elegido presidente de la Generalitat Valenciana, Juan Francisco Pérez Llorca. La cita, según ha podido contrastar EL ESPAÑOL, será la semana que viene. El día está elegido y pronto será oficial.

La última reunión entre Pedro Sánchez y un presidente valenciano tuvo lugar el 4 de octubre de 2024, justo antes de la catástrofe natural que se cobró 230 vidas en Valencia el día 29.

Desde entonces, a pesar de la desgracia y de las múltiples solicitudes del entonces presidente Carlos Mazón, el líder del Ejecutivo había rechazado un encuentro entre ambos.

El listado de reivindicaciones, en consecuencia, es el acumulado desde hace casi 14 meses, además de las que Pérez Llorca quiera introducir de su cosecha. La dana copará buena parte de las demandas de la Comunitat al Gobierno de España.

El Ministerio para la Transición Ecológica anunció recientemente la licitación de la redacción de un nuevo proyecto para las obras de desvío, encauzamiento y laminación que proteja de las avenidas a los municipios de la cuenca del Poyo.

El plazo de ejecución de este nuevo proyecto será de tres años y, en el mejor de los casos, la posterior ejecución de las obras requerirá otros tres más. Como pronto, en consecuencia, la zona cero de la tragedia no estará protegida hasta 2031.

Todo después de que el Gobierno de España dejara sin ejecutar el proyecto previo, validado en 2011 por Teresa Ribera, cuando la hoy vicepresidenta europea era secretaria de Estado de Zapatero.

El Plan Endavant para la reconstrucción de Valencia, diseñado por el exvicepresidente Francisco José Gan Pampols, calendarizó esta actuación. El mismo servirá de guía a Pérez Llorca para trasladar a Sánchez las demandas valencianas inaplazables.

La del Poyo es una de ellas. La Generalitat valenciana exigirá la ejecución del proyecto y que la misma se produzca lo antes posible.

Comisión mixta

Además, con el propósito de coordinar la reconstrucción entre ambas administraciones, la Generalitat reclama desde hace un año la creación de una comisión mixta entre el Gobierno y la Generalitat, a la que el líder socialista se negó.

El nuevo presidente autonómico del PP confía en que la dimisión de Mazón abra paso a la recuperación de la cooperación entre administraciones, y en que esta se traduzca en la creación de la mencionada comisión que sí se creó entre gobiernos socialistas para afrontar los estragos del volcán de La Palma.

La Generalitat Valenciana también requiere del Estado otras cuestiones, como la correcta dotación de personal a los ayuntamientos para gestionar las obras de reconstrucción, o que la fecha límite para presentarlos sea flexible y no impida su desarrollo.

Más allá de la dana, Juanfran Pérez Llorca acudirá al Palacio de la Moncloa con la misma reivindicación que sus tres antecesores en el cargo: la aprobación de un nuevo modelo de financiación autonómica o de un mecanismo de nivelación que permita corregir de inmediato la infrafinanciación valenciana.

El actual sistema de reparto, caducado desde el año 2014, tiene a la Comunitat Valenciana, junto a Murcia y Andalucía, a la cola en financiación por habitante.

Pedro Sánchez, junto a la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, el pasado 7 de octubre en el Congreso.

Pedro Sánchez, junto a la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, el pasado 7 de octubre en el Congreso. Europa Press

Desde entonces, la única solución brindada por el Gobierno central ha sido permitir a las regiones afectadas un mayor endeudamiento, concedido por el propio Ejecutivo mediante el denominado Fondo de Liquidez Autonómica (FLA).

La deuda valenciana no ha hecho más que crecer. Rebasó en primer semestre de este año los 60.000 millones de euros, y los expertos atribuyen hasta el 80% de la misma a la infrafinanciación sufrida por parte del Estado.

La dana y su elevado coste parecían el contexto propicio para que el Gobierno concediera al menos a la Comunitat Valenciana el mencionado fondo de nivelación que equiparara sus ingresos a los de la media de España, a la espera de que se reforme el sistema.

En cambio, Sánchez solo contempla de momento una quita de la deuda, que se concede a todos los territorios con criterios discutidos por las autonomías tras el pacto con ERC para la condonación de buena parte de la deuda catalana.

El otro gran asunto que Pérez Llorca pondrá sobre la mesa de Pedro Sánchez es la carencia de agua en la provincia de Alicante por la protección del caudal ecológico del Tajo y, en consecuencia, el recorte de las cantidades que aporta este río a través del trasvase Tajo-Segura.