Bryan, agricultor de Moncofa. EE
Bryan, agricultor de Moncofa: "Duermo en mis campos porque estoy desesperado, me roban 450 euros diarios en fruta"
El trabajador del campo no ve con buenos ojos su futuro: "Si esto sigue así, los cuatro que quedamos terminaremos".
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El agricultor valenciano Bryan Luengo lleva durmiendo en sus campos de cultivo desde hace 15 días para evitar que los ladrones le roben su cosecha de melones: "Estoy desesperado, me roban 450 euros diarios en fruta".
El trabajador del campo hace turnos para vigilar la cosecha por las noches, momento que algunos intentan aprovechar para robar la fruta de campos como el de Bryan.
"Si esto sigue así, los cuatro agricultores que quedamos en esta zona terminaremos cerrando, tanto personas mayores como jóvenes emprendedores". Este último es el caso de Bryan, que tiene 30 años.
Este agricultor cultiva los alimentos que él y su familia consumen y que, además, vende tanto en su propia tienda como al pormayor. "Somos 10 o 12 familiares que comemos de lo que nos da este campo y de vender nuestra cosecha", explica.
Así, cuenta cómo él y su familia se organizan para no perder ni un fruto de su trabajo: "El que no está vendiendo en la tienda está llenando cajas o en el campo controlando que nadie entre".
Además de ser un oficio sacrificado, Bryan explica que no tiene horarios: "Nos da igual hacer 12, 14 o 20 horas". Afirma que está "desesperado", pero todo sea por proteger su cosecha.
"Nos están robando el pan de cada día, me han robado ya más de 1.000 kilos de melón", lamenta el agricultor de Moncofa. Dice que está viviendo una situación "insostenible", y que no sabe cómo acabará "si esto sigue así".
"La gente viene y carga. Algunos se llevan 20 melones, otros un palé, y está el típico que viene con una bolsa y se lleva 4", detalla Bryan. Y añade: "Si no durmiéramos aquí, los melones que quedan no estarían".
"Que cada día te roben el equivalente a 450 euros, multiplicado por cien días que dura la temporada, es mucho dinero", subraya.
Por ello, Bryan ya ha denunciado lo sucedido ante las autoridades, e incluso ha intervenido la Guardia Civil: "Los ladrones nos conocen, saben nuestras matrículas, y nosotros los conocemos a ellos, pero hasta que no se les pilla robando no se puede hacer nada".
"La cosecha la trabajamos nosotros, pero no para que nos la roben", denuncia Bryan. De ahí su solución: dormir en su trabajo para que no desaparezca.
Aunque algo que no puede controlar son las condiciones meteorológicas. Las fuertes lluvias que tuvieron lugar el pasado fin de semana también arruinaron parte de la cosecha de Bryan: "El granizo lo arrasó todo".
Así, entre los incesantes robos y la piedra que atravesó numerosos melones, este trabajador del campo de Moncofa cree que este año "a los agricultores los han matado".