Después de semanas de presiones por parte de medios de comunicación y representantes políticos, el estado de Florida reconoció que no cuenta con un plan formal para enfrentar huracanes en Alligator Alcatraz, el nuevo centro de detención de inmigrantes ubicado en el corazón de los Everglades. La información fue confirmada por el propio Departamento de Gestión de Emergencias (FDEM, sigla en inglés), tras una solicitud del Miami Herald sobre los protocolos vigentes en caso de desastres. La portavoz del organismo, Stephanie Hartman, fue tajante: “No hay registros que respondan a esta solicitud”, dijo por correo electrónico.
Preocupaciones por la seguridad y la infraestructura
Este vacío en la planificación sale a la luz apenas días después de que el gobernador Ron DeSantis realizara una enérgica defensa del centro durante una conferencia de prensa. Acompañado por Kevin Guthrie, jefe del FDEM, el mandatario aseguró que el estado está preparado para proteger tanto al personal como a los inmigrantes detenidos en el sitio. Sin embargo, ni él ni Guthrie ofrecieron detalles sobre medidas concretas más allá de afirmaciones generales sobre la resistencia de las instalaciones.
Guthrie explicó que su equipo visitó varias prisiones del estado para evaluar posibles rutas de evacuación en caso de tormentas severas, pero evitó comprometerse con la ejecución de un plan específico. De acuerdo con el gobernador, las tiendas de campaña y remolques que conforman Alligator Alcatraz están diseñados para resistir vientos de hasta 110 millas por hora, equivalentes a un huracán de categoría 2. Si se esperan vientos más fuertes, dijo, se procedería a evacuar el lugar.
Sin embargo, expertos en desastres naturales advierten que el mayor riesgo no proviene únicamente del viento. Durante la inauguración del centro, una tormenta provocó filtraciones de agua en las tiendas con aire acondicionado donde se alojan los detenidos. El sitio también depende de generadores eléctricos, lo que plantea interrogantes sobre la sostenibilidad de los servicios básicos en un contexto de emergencia climática.
Alerta en la Tribu Miccosukee y demandas por el cierre
Una de las voces más críticas es la de la Tribu Miccosukee, cuyas viviendas se encuentran en las inmediaciones del centro de detención. Curtis Osceola, asesor ejecutivo de políticas de la tribu, calificó de “imprudente” la falta de planificación formal y adelantó que quieren sumarse a una demanda para cerrar el lugar por motivos ambientales. A diferencia de Alligator Alcatraz, las casas de la tribu están construidas en concreto armado y cuentan con planes de emergencia anuales, además de un refugio especialmente diseñado para enfrentar huracanes.
Osceola también recordó las consecuencias del huracán Irma en 2017, cuando casi dos pies de agua cayeron sobre la zona de Big Cypress. “Necesitamos bombas para mantener la aldea seca”, comentó. El riesgo de inundaciones en la región no es hipotético: incluso tormentas que no llegan a categoría de huracán pueden provocar acumulaciones de agua peligrosas en el terreno donde se construyó el centro de detención.
Una promesa sin respaldo técnico suficiente
Mientras el gobernador asegura que “los expertos en huracanes tienen todo cubierto”, los datos sugieren otra realidad. El hecho de que el FDEM no tenga documentación oficial sobre protocolos de huracanes específicos para Alligator Alcatraz expone un nivel de improvisación alarmante. A pesar de las visitas y evaluaciones mencionadas por Guthrie, no existe ningún compromiso concreto ni acciones detalladas ante un eventual desastre natural.
Los residentes de la zona no se sienten tranquilos. Informes de vecinos aseguran que incluso en tormentas menores, la lluvia logra inundar áreas críticas del sitio, como la pista de acceso. Esta falta de previsión, advierten, pone en riesgo no solo a los inmigrantes detenidos, sino también al personal que trabaja allí y a las comunidades vecinas. “Todo esto demuestra lo mal planificado que estuvo”, insistió Osceola, quien además denunció que el centro fue concebido más como un símbolo político que como una solución efectiva.