En medio de la rutina habitual de compras, los clientes de un Walmart en Albuquerque, Nuevo México, fueron testigos de una escena poco común: la detención violenta de un hombre latino por parte de agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés). En el incidente, ocurrido el pasado 7 de julio, los oficiales utilizaron una pistola taser para someter al individuo, según confirmó la agencia federal.
Detención en una tienda de Walmart: ICE explicó que el hombre era "una amenaza inmediata"
Un video, que rápidamente se hizo viral en redes sociales, captó el momento exacto en el que tres personas, dos de ellas con chalecos tácticos y el rostro cubierto, intentaban detener al sujeto al final de uno de los pasillos de Walmart. Finalmente, uno de los agentes dispara la pistola taser, provocando que el hombre cayera al suelo de inmediato. La escena generó alarma entre los compradores presentes.
La agencia confirmó que el detenido es un ciudadano venezolano que se encontraba en el país de manera ilegal. De acuerdo con ICE, el hombre huyó de los oficiales e ingresó a la tienda en un aparente intento de escape, lo que llevó a los agentes a actuar de forma inmediata dentro del local comercial.
En un comunicado enviado a medios locales, ICE explicó que el uso de la pistola taser se justificó debido a que el hombre “representaba una amenaza inmediata para la seguridad de los agentes, los compradores y los empleados”. Asimismo, la agencia aseguró que sus oficiales están entrenados para usar la fuerza de manera “juiciosa”, y conforme a las políticas federales y de la institución.
“El objetivo al emplear esta medida fue mitigar el riesgo y evitar una escalada mayor”, puntualizó la agencia. La intervención, aunque abrupta, fue defendida por ICE como necesaria ante el comportamiento del individuo, que, según detallaron, ya tenía antecedentes con las autoridades locales.
Historial del detenido y evaluación de riesgo por parte de ICE
ICE también informó que el hombre había sido arrestado recientemente por el Departamento de Policía de Albuquerque, bajo cargos que incluyen conducir bajo los efectos del alcohol, resistirse al arresto, evadir a la policía y obstruir a un oficial. Sus antecedentes fueron claves para que la agencia federal lo considerara “un peligro para la comunidad”.
“Estas decisiones nunca se toman a la ligera”, enfatizó un portavoz del ICE. “Sin embargo, la seguridad de los oficiales y la protección del público son prioridades fundamentales”, agregó. La agencia remarcó que la conducta previa del individuo influyó directamente en la forma en que se ejecutó la detención.
Hasta el momento, ni Walmart ni el Departamento de Policía de Albuquerque emitieron comentarios oficiales sobre el incidente. El caso ha generado diversas reacciones en redes sociales, donde algunos usuarios expresaron preocupación por el uso de fuerza en un espacio público concurrido.