Mariscadoras en la playa de Lourido, en Poio (Pontevedra).
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Reabren bancos marisqueros y bateas de Galicia, cerradas por la presencia de la toxina lipofílica
La marea roja de toxinas que ha afectado a las rías gallegas en las últimas semanas se encuentra en un periodo de inicio de remisión; sin embargo, continúan sin estar operativos tres de cada cuatro de los más de medio centenar de polígonos de bateas existentes en la comunidad gallega
Más información: La toxina lipofílica obliga a cerrar el 80% de las bateas de mejillón de Galicia
Varios bancos marisqueros de la ría de Pontevedra y polígonos de bateas de mejillón en la ría de Arousa han vuelto a abrir tras el decreto del Instituto Tecnolóxico para o Control do Medio Mariño (Intercmar).
Así, se ha comprobado que la marea roja de toxinas que ha afectado a las rías gallegas en las últimas semanas -más concretamente, de toxina lipofílica (diarreica)- se encuentra en periodo de inicio de remisión.
En lo tocante a polígonos de bateas, ha quedado reabierto este jueves el de Sada 1, en la ría de Ares-Betanzos, al igual que los de A Pobra A y C, en la ría de Arousa, en donde hace dos días ya volvieron a estar operativos los de Vilagarcía B1 y B2.
Con todo y tal y como recoge Europa Press, continúan sin estar operativos tres de cada cuatro de los más de medio centenar de polígonos de bateas existentes en Galicia.
Mientras, esta semana también han reabierto varios bancos marisqueros en la ría de Pontevedra, en zonas como Poio, al igual que la coruñesa ría de O Burgo.
De tal forma, solo quedan cerrados en Galicia los bancos marisqueros de Corcubión-Fisterra, tres zonas de la ría de Pontevedra y otras tres de la ría de Vigo.
