El calor extremo impulsa la venta de abanicos en Vigo: "Muchos llegan muriéndose de calor"
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El calor extremo impulsa la venta de abanicos en Vigo: "Muchos llegan muriéndose de calor"
Los establecimientos de souvenirs de la ciudad han notado un incremento en la venta de este tipo de productos, tanto entre vigueses como turistas
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Quien diga que en Galicia no hace calor, probablemente nunca ha estado aquí en verano. Si bien es cierto que, tradicionalmente, las altas temperaturas no eran habituales en el noroeste peninsular,donde incluso la lluvia solía hacer acto de presencia durante los meses estivales; la situación está cambiando. Ya sea por el cambio climático o por una racha de azar, Galicia vive un verano especialmente caluroso.
En Vigo, los días con temperaturas cercanas a los 30 grados ya no son una excepción, sino parte de la rutina. Pero esta última semana de julio, el calor ha golpeado con más fuerza que nunca: se esperan máximas de hasta 34 grados, lo que ha llevado al Ministerio de Sanidad a declarar la alerta roja por calor extremo.
La sorpresa ha sido notable, especialmente entre los turistas que despertaron con el impacto de una ola de calor inesperada. Muchos han salido en busca de soluciones para soportar las horas más sofocantes del día. Desde refugiarse en espacios con aire acondicionado, hasta recurrir a una estampa clásica y funcional: el abanico.
Y es que el calor ha disparado las ventas de este producto en la ciudad, convirtiéndolo en una necesidad más que un simple recuerdo. Las tiendas de souvenirs confirman el repunte, tanto por parte de turistas como de los propios vigueses.
"Incluso los vigueses han tenido que parar a comprar", cuentan desde Establecimientos Jamaica, en la Praza da Pedra. La dependienta afirma que la demanda ha subido porque muchos llegan "muriéndose de calor".
En la tienda Regalos La Piedra, en la rúa Pescadería coinciden: "Los vigueses no están acostumbrados a este calor y no les queda más remedio que comprar un abanico." Aun así, estiman que el 50% de las ventas son todavía con fines decorativos, aunque incluso los turistas han tenido que usarlos estos días.
"La gente viene a Galicia para escapar del calor... y se llevan una decepción cuando se encuentran con temperaturas de más de 30 grados", manifiestan.
En cambio, en Bazar Guay, también en la calle Pescadería, aseguran que el calor no ha repercutido en sus ventas, ya que sus abanicos son exclusivamente souvenirs y no suelen comprarse para uso práctico.
Recomendaciones para combatir el calor
Con todo, además de confiar en la magia del abanico para luchar contra la ola de calor, el Ministerio de Sanidad ha emitido una serie de recomendaciones para evitar sustos durante los próximos días. En concreto, se recomienda beber agua con regularidad, mantenerse en lugares frescos y evitar la exposición directa al sol durante las horas centrales del día.
Además, el Ministerio recuerda que no todas las personas son igual de vulnerables al calor, por lo que es fundamental prestar especial atención a los colectivos de mayor riesgo, como las personas mayores, embarazadas, menores de cuatro años, quienes padecen enfermedades crónicas y quienes trabajan al aire libre.
