El Español
Quincemil
Vivir
|
Salud

La psicóloga María Esclapez en Vigo: "No hagas de la madre de tu pareja"

Con más de 300.000 seguidores en Instagram, la terapeuta ha ganado gran fama por sus análisis de las relaciones sociales. En enero publicó su tercer libro, "Me quiero, te quiero"
La psicóloga, divulgadora y escritora María Esclapez con su último libro "Me quiero, Te quiero".
cedida
La psicóloga, divulgadora y escritora María Esclapez con su último libro "Me quiero, Te quiero".
Ofrecido por:

María Esclapez es psicóloga sanitaria con formación en Psicología Clínica y de la Salud, sexóloga clínica, terapeuta de parejas y sexcoach. Entre tanto, también colabora con diversos medios como El País o Cosmopolitan y, casi a tiempo a completo, ejerce de divulgadora en redes sociales a través de su cuenta de Instagram, donde alberga una comunidad de más de 300.000 seguidores.

Además, Esclapez ha publicado a comienzos de este año su tercer libro, Me quiero, te quiero, junto a Penguin Random House; una "guía para desarrollar relaciones sanas" que está siendo todo un éxito editorial. La psicóloga se encuentra muy sorprendida con el buen feedback: "Cuando lo escribía pensaba no sé quién leerá esto, pero sea quien sea espero que le sirva".

Con motivo de la gira de presentación y firmas del libro, María Esclapez ha hecho una parada en Galicia, concretamente en Vigo, en la que hemos podido charlar con ella sobre Me quiero, te quiero y algunas de las cuestiones que trata.

María Esclapez con su nuevo libro. Imagen: cedida

Psicóloga, sexóloga, terapeuta de pareja, sex coach... pero además de eso, divulgadora activa en redes. ¿Cuándo nació esta última faceta?

Pues hace muchísimos años, antes incluso de que empezara a ver a pacientes. Estaba estudiando el máster de Sexología Clínica y Terapia de Parejas, con 20 años, y empecé con un blog. Me di cuenta de que me encantaba ir contando las cosas que iba aprendiendo. Fui compaginando la divulgación con la atención a pacientes y hace unos años decidí abrirme las redes que tengo, principalmente Instagram.

A comienzos de este 2022 publicaste Me quiero, te quiero, tu tercer libro, toda una guía para desarrollar relaciones sanas. ¿Pero qué entendemos por "relación sana"?

La palabra que mejor define una relación sana para mí es la tranquilidad, porque es una relación en la que hay estabilidad emocional constante. Eso no quiere decir que no haya conflictos o discusiones, pero cuando las hay son una oportunidad para expresas emociones y opiniones, negociar, poner límites; para evolucionar, al fin y al cabo.

Sin embargo, en una relación que no es sana nos encontramos lo contrario. Cada vez que hay un pequeño conflicto, por pequeño que sea, es como si la relación pendiese de un hilo. Ya no hay tranquilidad.

¿Y podemos aplicar esa definición tanto para un amor romántico de pareja como para una amistad?

Sí, muchas de las cosas que cuento en el libro se pueden aplicar a amistades o relaciones con la familia. Al final de lo que estamos hablando es de vínculos, y en este caso, si hablamos de estabilidad emocional en el vínculo, lo podemos aplicar a las amistades.

"La palabra que mejor define una relación sana para mí es la tranquilidad"

Quería preguntarte, ya que que estás tan expuesta en redes y te siguen tantas personas y a veces pueden ser un terreno farragoso. ¿Crees que tienes una relación sana con tu comunidad de seguidores?

Creo que sí, la verdad. Es verdad que a veces llega algún comentario para criticarte, pero no desde la asertividad, que a mí lo que venga desde la asertividad me parece súper bien. Yo no tengo problema, al principio lo llevaba un poco peor. Soy muy exigente y pensaba "¿Y si tienen razón?". Pero una vez empiezas a trabajar en ti misma y ves que ayudas a la gente con lo que haces, ya no me afecta. Bloqueo a esa persona y punto. Sí que me genera un poco de compasión porque pienso "¿Qué le pasará para venir a descargar esa frustración en mi perfil que no se mete con nadie?".

Por lo demás muy bien, tengo la sensación de que las personas que me siguen son una pequeña o gran familia. Siempre están ahí, me cuentan sus cosas, se abren como si me conocieran de toda la vida y cuando vienen a las firmas me dan unos abrazos eternos y algunas personas hasta se ponen a llorar. ¡Y yo lo vivo con mucha intensidad porque soy una intensa!

Al ejercer como psicóloga en consulta y después continuar como terapeuta y divulgadora en redes, ¿no sientes que estás dedicada 24 horas al día a tu trabajo?

Todo el rato. De hecho, uno de los últimos conflictos que estoy teniendo conmigo misma es organizarme mejor por ese motivo. Yo empecé con la divulgación como un hobby, pero ahora es un trabajo, hay una responsabilidad más grande. Salgo de la consulta y sigo trabajando, que si tengo que subir un post o contestar a alguien que me haya escrito. Estoy aprendiendo a poner límites, he puesto muchos ya, pero siento que cada día me encuentro mejor conmigo misma, con mi trabajo en consulta y en redes... Y volviendo a la pregunta anterior sobre si tengo una relación sana: estamos trabajando en ello (risas).

Claro, los límites son muy borrosos cuando te dedicas a algo que te gusta y que hacías antes en tu tiempo libre.

Sí y cuando estás con tus amigos te cuentan también sus problemas, claro. A veces ya les digo "te respondo modo amiga, mándalo a la mierda".

¿Una cuestión generacional?

Entrevista con María Esclapez en el hotel Ciudad de Vigo.

Buscando información sobre tu último libro encontré esta afirmación: "Todas las generaciones buscan tener relaciones más sanas y conscientes". ¿Todas las generaciones se implican por igual en esto?

Te puedo decir que por una parte sí y por otra no tanto. Nuestros abuelos tienen una concepción completamente diferente sobre el amor y las relaciones, de hecho practican un modelo de amor romántico y puede ser diferente. Pero sí que, remitiéndome a mi experiencia en las firmas, ha venido a verme gente de 80 años. Algo está calando también en esas generaciones, ¿no?

Pero bueno, por norma general, cala sobre todo en los jóvenes y adolescentes, que los pobres están perdidísimos. Salió una noticia hace poco que en las estadísticas del INE la violencia machista había aumentado en menores de 18 años... Es muy mala noticia, algo estamos haciendo mal. Creo que el mensaje puede llegar, pero es muy difícil.

¿En qué edad se mueve tu comunidad de seguidores?

De los 17 hasta los 30, lo que no quiere decir que no haya gente más mayor.

"Nuestros abuelos tienen una concepción completamente diferente sobre el amor"

¿Y a quién le recomendarías especialmente leer tu libro?

¡A todo el mundo! No porque sea mío, sino porque creo que lo pueden hacer. A veces me preguntan "¿y si no tienes pareja lo puedes leer?", pues claro que sí. Es cierto que yo me centro mucho en las relaciones de pareja porque es donde más se observan las estrategias que señalo en el libro, pero es que si tienes amigos te lo puedes leer, si tienes familia también, si lo acabas de dejar con tu pareja... Además, como no sé "hablar difícil", el libro está escrito de forma muy sencilla y es accesible para todos los públicos.

"Lo que más me preguntan es si lo que están viviendo es normal"

Y María, tú que tratas con pacientes y personas de diferentes edades, ¿Qué es lo que más se suele repetir en las primeras consultas? ¿Qué problemas están más extendidos?

Es una pregunta complicada, pero creo que lo que más me preguntan en general es si lo que están viviendo es normal. La persona que acude a consulta es porque lo está pasando mal por algo, puede que sea por algo normal y que no sea sano, o también puede ser que esté pasando por algo que no sea normal y que sea necesario cortar o limitar.

¿Crees que esta situación mejoraría si la sociedad estuviese más educada en el ámbito emocional?

Eso sería lo guay, el sueño de mi vida. Que desde pequeños se vaya dando educación emocional y afectiva. Algo tan sencillo como preguntarle a los niños dónde sienten la ira cuando se enfadan o dónde sienten la tristeza cuando están tristes. Nos ahorraríamos muchos problemas.

Tal vez para eso se necesitaría formar también al profesorado...

Hay profesores que ya están super formados porque están viendo que es algo super importante. De hecho, muchos de ellos, sobre todo quienes trabajan con alumnos de la ESO, están poniendo en práctica cosas de mi libro y de una guía gratuita que hemos sacado.

María Esclapez, retratada por la fotógrafa Silvia Portero.

En este ámbito de concienciación emocional, saber detectar comportamientos tóxicos y demás, ya que no ha llegado mucho a través de la educación reglada, han hecho mucho bien las redes sociales. Términos como ghosting, gaslighting o love bombing se han dado a conocer ahí. ¿Crees que esto es beneficioso o ha hecho que la gente "autodiagnostique" sus relaciones?

A ver, no es un diagnóstico como tal, no es lo mismo decir "me han hecho ghosting" que decir "tengo depresión", que es algo más clínico y difícil. Pero es verdad que hay gente que tiene un cacao importante. Me preguntan "si he dejado a mi pareja y ya no le hablo, ¿le estoy haciendo ghosting?" y yo les digo, "a ver, cariño, si ya has cortado el vínculo ya está". (risas)

Me quiero, te quiero está lleno de consejos prácticos, al igual que tu perfil de Instagram. Pero a mí me gustaría saber antes de despedirnos cuál ha sido el mejor consejo que te han dado a ti.

¡Esta pregunta no me la han hecho nunca! Pues... hay uno que me dijeron hace un montón de años que yo no lo entendí en su momento. Como te decía antes, soy muy exigente y siempre que he tenido parejas, que además hablo de ellas en el libro, era muy exigente conmigo misma y hacia ellos. Por eso tenía un papel muy sumiso, me mostraba servicial ante las peticiones de mi pareja. El problema es que era algo unilateral.

Entonces una vez una persona me dijo "no hagas de la madre de tu pareja" y no lo entendí, me lo tomé super mal. Pasaron los años y pensé "es verdad, estoy haciendo de madre". Desde ese momento ya pensaba cada vez que hacía algo "¿Estoy haciendo de madre?", porque si es así, no lo quiero hacer.

Vivir