Cuando la infografía supera a la ficción: el antes y el después de algunas obras de Vigo
Tras el anuncio de una nueva obra suele llegar una imagen hecha por ordenador de cómo lucirá la infraestructura en la ciudad. En estas postales digitales suelen aparecer familias felices sin rostro, perros irreales y entrañables parejas de paseo. Los encargados de realizarlas son los estudios que se presentan a los concursos para su ejecución.
Además de la presencia humana, las infografías arquitectónicas habitualmente presentan elementos que, una vez realizada la construcción, es difícil encontrar. Por supuesto, este fenómeno no sucede solo en urbes como Vigo. Una relación dispar entre el boceto de cómo quedará y el acabado final.
La característica principal de la discordia es la vegetación. Si bien, por lo general, el grueso de la infraestructura se asemeja en mayor medida a lo planteado, los detalles de ornamentación más verdes suelen quedar abandonados en el tintero. En un artículo de El Periódico de España sobre el asunto, el urbanista y geógrafo Antonio Giraldo apuntaba que "un render es una herramienta de marketing más que de urbanismo o arquitectura".
Puerta del Sol
La gran obra de la discordia. La Puerta del Sol ha ocupado multitud de páginas desde que se hizo público su planteamiento hasta sus últimos pasos. El presupuesto destinado roza los 17 millones de euros y está financiado por los fondos europeos FEDER.
El proyecto, a cargo de Civis Global, tenía como objetivo principal soterrar el tráfico de la zona. La plaza peatonal se estrenó el pasado mes de agosto, pero la construcción del pase subterráneo entre la calle Colón y Elduayen todavía sigue en marcha.
Infografía y realidad comparten bastante parecido, pero en ambos casos las críticas van dirigidas a su aspecto desangelado. No hay asientos públicos en ningún punto de la plaza ni zonas de sombra. Tampoco se han dispuestos árboles, jardineras ni fuentes.
Vía Verde
Uno de los proyectos más ambiciosos emprendidos por el Gobierno municipal ha sido la construcción de la Vía Verde, un recorrido de cuatro kilómetros entre Vigo y Redondela. La obra ha supuesto una inversión de cerca de tres millones de euros y es todo un éxito entre los vigueses. Difícil no encontrar viandantes por esta senda que facilita el camino entre Teis, Chapela y Vía Norte.
Sin embargo, el paseo —carril bici y zona peatonal— ha recibido numerosas críticas por su falta de verde, a pesar de su denominación. Si bien hay elementos que tan solo necesitan del paso del tiempo, como el crecimiento de las semillas plantadas, otros no cuentan con explicación aparente.
Los laterales de la senda presentan tramos de grava, tierra y una ausencia latente de vegetación. Vecinos de la zona también acusan la falta de fuentes de agua y más bancos a lo largo del recorrido.
Ronda de Don Bosco
La humanización de Ronda de Don Bosco contó con un presupuesto estimado de 1,5 millones de euros y comenzó en febrero de 2020, antes de la pandemia. Fue un proyecto cofinanciado por la Diputación de Pontevedra y el Concello de Vigo.
Entre idas y venidas con motivo del coronavirus, la obra se estrenó en la primavera de 2021. El desarrollo de los trabajos en Ronda de Don Bosco no estuvo exento de polémica; se talaron dos cedros históricos de la plaza por estar supuestamente en mal estado.
Además, el aspecto definitivo arroja a la calle una tonalidad gris. Aunque sí se cumplió con la instalación de unos techos de madera presentes en los renders previos, lo cierto es que no hay ni rastro del suelo cubierto de césped ni de las jardineras. Tampoco están instalados los cimientos para su futura colocación.
Calle Taboada Leal
Continuando con las obras en el entorno de Ronda de Don Bosco, la humanización de la calle Taboada Leal tal vez sea la que presenta un aspecto más diferente con respecto al render. El presupuesto de la obra, también financiada por la Diputación y el Concello, ascendía al medio millón de euros.
La infografía del proyecto presentaba una especie de glorieta verde repleta de flores. Sin embargo, una vez acabada la obra, esta calle dista mucho de esa bucólica imagen.
Ciudad de la Justicia
Está claro que las recreaciones digitales de los arquitectos pueden ser algo exageradas. Pero cuando un proyecto cumple bastante las expectativas, también merece ser aplaudido. Este es el caso de la Ciudad de la Justicia, una ambiciosa infraestructura que supuso una inversión de 40 millones de euros por parte de la Xunta de Galicia.
El edificio ha cambiado el skyline de Vigo con su majestuosa fachada blanca, erigida a 80 metros sobre el suelo. Atrás queda el llamativo azul del antiguo hospital Xeral. El arquitecto Alfonso Penela, diseñador del proyecto, quiso recuperar la planta original de Martín José Marcide, en forma de H, y derribar algunos de los edificios delanteros para que el acceso al complejo se haga por una gran plaza.
Sin embargo, a pesar de la espectacularidad del edificio, no pasa por alto la falta de verde en el resultado final. Las zonas ajardinadas de las infografías no se encuentran presentes a día de hoy en la Ciudad de la Justicia, una obra ya terminada pero a donde todavía no se ha trasladado la actividad de los juzgados.
Barrio das Flores
En el caso del Barrio das Flores, según recogen diversos medios locales en 2018, la diferencia entre la idea y la realidad surgió desde las advertencias vecinales. La escalera y el retranqueamiento del muro se descartó por temor a afectar a las casas de la rúa da Rosa y la posibilidad de que los autobuses escolares no pudieran tener espacio suficiente para circular.
Finalmente se ganó una amplia plaza con bancadas de madera y jardineras y se instaló el letrero que anuncia el nombre del barrio sobre el muro que había originalmente.
Praza da Miñoca
La Praza da Miñoca es uno de los puntos más singulares de Vigo, inconfundible gracias a la enorme escultura en forma de lombriz que la atraviesa. El pasado mes de julio, Abel Caballero inauguró la rehabilitación integral del espacio, que contó con un presupuesto de 1,6 millones de euros.
La reforma del parque ha sido aplaudida por los vigueses, aunque algunos han señalado que la zona ya presenta de nuevo un aspecto algo descuidado. El río artificial que se podía ver en las infografías es hoy una realidad. La Praza da Miñoca también se ha reforzado con 160 árboles nuevos, que se suman a los 180 que existían previamente.
Todo ello convierte la obra en un éxito donde poco se echa en falta de la infografía, pues la realidad cumple con creces las expectativas.
