"Siempre, en Valdemorillo ha habido toros siempre", dice Miguel Partida, concejal de seguridad, movilidad, transporte, juventud y deportes del pueblo. En la finca de Montalvo tientan los cuatro puertas grandes de Madrid que harán el paseíllo este fin de semana en la Feria de San Blas. "De verdad, siempre", insiste Partida apoyado en la tapia. 

"Hasta 1885 no encontramos recortes de prensa de los festejos taurinos celebrados en Valdemorillo. Es en la revista La Lidia. En esta época se celebraban capeas, muy esperadas por los toreros para empezar la campaña taurina, donde se citaban ante reses de gran trapío", cita Partida en la investigación a la que ha tenido acceso este diario. Pretende demostrar que desde el siglo XIX se han celebrado festejos taurinos de "forma ininterrumpida" en Valdemorillo.

Una de las primeras evidencias que aparecen recogidas es un recorte de La correspondencia de España. "La fuerza" tuvo que intervenir en la localidad evitando un altercado público "por no verificarse una corrida de toros". En 1919, unos chavales, "una cuadrilla de torerillos de invierno", sufrió un accidente con el tren "al descender [...] para participar en la primera capea del año". O la muerte del banderillero al que invitaron a salir al ruedo desde el tendido: fue corneado. 

Valdemorillo

Junto a Miguel Partida ha trabajado en la investigación de los antecedentes taurinos del municipio "la aficionada Helena García", aclara el edil. "Empecé a hacerlo antes de salir elegido como concejal. Todavía no hemos terminado. Llevamos año y medio. Queríamos que se conociera la historia taurina de Valdemorillo". 

El scroll descubre el festival de los hermanos Bienvenida "Antonio y Juan" para la reconstrucción de una ermita "en los 60". Juan Mora "cuajó una

faena espléndida, llena de garbo y torería", según Joaquín Vidal en 1983, la misma tarde que no se suspendió la corrida por nieve: el derechazo de Pedro Somolinos como si estuviera en Valdesquí.

El debut de Joselito "como ganadero" en el 88. El de José Tomás como sin caballos en el 91. O las quejas del empresario Maximino Pérez en 2001 por no poder vender la carne de los toros. "'Desde hace meses, no he mantenido una sola conversación sobre toros. Todo son vacas locas'. El empresario de Valdemorillo está harto", escribía Luis Martínez antes de perderse en Cannes.

"Maximino Pérez sólo es preguntado sobre qué hará con la carne de los toros lidiados. '¡Ya ha cambiado el mundo taurino, ya!', exclama". El actual empresario de Illescas y Cuenca calculó unas pérdidas "de tres millones por incinerar y otros tantos por no poder vender las canales".

"Toros durante la Guerra"

"Aquí hubo toros también durante la Guerra Civil", señala el alcalde de la localidad, Santiago Villena, del PP, que gobierna gracias al apoyo de Ciudadanos. "No íbamos a ser nosotros quienes cargáramos con el dudoso honor de dejar Valdemorillo sin toros. Soy buen aficionado y tengo un equipo que me respalda", justifica su decisión de apoyar la tauromaquia. 

Villena cree que hay razones "medioambientales, económicas y sociales, tenemos el respaldo de la masa social". El presupuesto para las fiestas es de "240.000 euros". No es el total destinado a la Feria de San Blas. "El porcentaje es rentable para el pueblo. Hablamos del retorno y claro que nos interesa. Tenemos también el festejo de septiembre, hemos dado un salto de calidad". 

Álvaro Lorenzo, David de Miranda, López Simón y Daniel Luque en Montalvo Nautalia 360

Se refiere a la presencia de la empresa Nautalia 360, la apuesta de Rafael García Garrido por diversificar la apuesta taurina de la empresa de viajes, por salir de Las Ventas. "José Antonio San Román nos habló de esta plaza. Nos entrevistamos con el Ayuntamiento y vimos que coincidían nuestro objetivos", explica Víctor Zabala, socio del director gerente de Nautalia. "Sin ellos habría sido imposible organizar la feria", confirma el alcalde el match.

Sin dinero para novilladas

La novillada se ha sustituido por unos recortadores. "¿Novillada? Se traslada a septiembre. Era un tema de ajuste presupuestario, sinceramente", señala Zabala, que observa un "problema" con las novilladas picadas. "El festejo de recortes tiene un 50% menos de costes", explica, "incluida la cobertura de seguridad social, cada novillero cuesta 6.000 euros. Por 18.000 euros tienes a cualquier cantante en las fiestas que sí conoce la gente. La fiesta tiene que encontrar soluciones. Los tiempos políticos no van a ayudarnos". 

Los antitaurinos también tocaron tierra en Valdemorillo. "Hay voces discordantes pero no tanto como parece", dice Santiago Villena. "Lo que se ha puesto en tela de juicio es el contrato de concesión, que es antiguo y resulta un hándicap. Nuestro departamento jurídico trabaja para actualizarlo". Víctor Zabala prefiere no hacer ninguna valoración del pliego. "Delimita las obligaciones del Ayuntamiento y la empresa y es muy difícil de llevar a la práctica", resume el alcalde. "Hemos hecho una interpretación laxa para sacar adelante la feria". 

Por la plaza cubierta llega una brisa a San Isidro. Los carteles tienen el remate de cualquier día del abono en Madrid. "Hemos conseguido la feria que queríamos. Son buenos carteles. No es presuntuoso. Hemos llenado los primeros autobuses", que saldrán gratis desde Las Ventas. Alcurrucén y Montalvo "son un punto más. A base de trabajo van a salir las cosas bien", confía Víctor Zabala.

Desde Valdemorillo pretenden poner los cimientos para que cuando se cumpla la profecía de Greta se sigan dando toros. "Formamos parte del proyecto de expansión de Nautalia. Que hayan desembarcado aquí es buena noticia", comenta ilusionado el alcalde. "En Roquetas encargué un estudio de impacto económico: cada euro apostado en el toro tenía un retorno de 80. De Valdemorillo no te lo puedo decir todavía. La fiesta tiene aquí mucho arraigo", apostilla Zabala.

Los carteles: 

Sábado 8 de febrero: Alcurrucén para Juan Ortega, José Garrido y David de Miranda.

Domingo 9 de febrero: Montalvo para Álvaro LorenzoDaniel Luque y López Simón.