La crisis de la vivienda en España es el resultado directo de un choque entre una demanda excesiva y una escasez de oferta. Sin embargo, muchos se preguntan, ¿por qué no se construye más?
Javier Díaz-Giménez, economista, resolvió esta duda en laSexta Xplica sosteniendo que el principal problema detrás de esto es la mala regulación del suelo, es decir, que no se puede construir hasta que se liberalice el territorio.
Además de esto, destacó la importancia de discutir sobre si lo que ocurre es 'especulación' o 'inversión' es "absolutamente irrelevante" en vista de que este no es el ojo del huracán detrás de esta crisis, sino la construcción.
"Se acabó el problema"
"La discusión semántica de si es especular o invertir es absolutamente irrelevante", comenzó señalando el economista respondiendo a la sindicalista Afra Blanco.
Con esto, recalcó que la verdadera cuestión reside en la falta de vivienda, más que en inversión o especulación: "El problema de la vivienda es que no hay suficientes, ¿y por qué no hay suficientes? Porque el territorio está mal regulado y ya está".
Afra Blanco, sindicalista
Continuó explicando que habla de que está 'mal regulado' porque "no sé si fue un Austria o un Borbón al que se le ocurrió decir que toda España era rústica hasta que no la recalificáramos".
Cuando un suelo es calificado como 'rústico' significa que dicha parte del terreno está destinada principalmente a actividades agrícolas, ganaderas, forestales o de conservación de la naturaleza. Por ello, no es apto para la edificación urbana y no se puede construir.
Así, buscó ilustrarlo utilizando de ejemplo a la capital: "Si toda la Comunidad de Madrid fuera suelo urbano, no faltaría ni una sola vivienda en esta ciudad, pero resulta que es suelo rústico hasta que no se recalifica".
Expuso que es sencillo saber este dato porque "si te subes a cualquiera de las torres de la Castellana, ves donde acaba Madrid, en Villaverde Bajo hay lechugas plantadas a 5 kilómetros de la Puerta del Sol, eso no ocurre en ninguna ciudad del planeta, solo en las españolas".
Javier Díaz-Giménez, economista.
De esta manera, volvió al tema de la 'especulación', manifestando que este problema de regulación es el origen de esta práctica, ya que "esto es lo que genera escasez y eso es lo que genera especulación".
"¿Por qué no especulamos con camisas? Porque no están reguladas, porque hay todas las camisas que uno quiere comprar", exclamó Díaz-Giménez.
Al final, este círculo vicioso se resume en que se decide que alguna zona es suelo rústico, por ende no se pueden construir inmuebles y, "como no hay viviendas, alguien que tiene dinero la compra, invierte, especula, pero claro que especula", continuó exponiendo el experto.
Una vez expuesta esta situación, cabe plantearse alguna solución. Así, el economista planteó: "Liberaliza el suelo, permitamos la construcción de viviendas y se acabó la especulación porque no hay nada que haga una vivienda distinta de una camisa".
"En el momento en que tú liberalices el suelo, que permitas que se construya, que autorices las alturas y los volúmenes de construcción, se acabó el problema de la vivienda", sentenció tajante Díaz-Giménez.
