Si bien el verano está llegando a su fin y la mayoría de trabajadores han disfrutado de sus vacaciones, son muchos los que no han podido permitirse este período de descanso.
Así, mientras para unos relajarse y disfrutar del tiempo libre lejos del trabajo es parte de su rutina veraniega, para quienes poseen salarios bajos o condiciones laborales difíciles, unas vacaciones son prácticamente un lujo difícil de alcanzar.
Marimar Jiménez, limpiadora de hoteles de 63 años y miembro del sindicato Las Kellys, comparte esta realidad. Según ella, sus ingresos no le permiten tomarse ni unos pocos días fuera del trabajo.
Las limpiadoras de hoteles
El debate acerca del alto coste de las vacaciones para los españoles cobró especial protagonismo en el plató de LaSexta Xplica, donde economistas, empresarios, sindicalistas y trabajadores se dieron cita para hablar del tema.
Una de las perspectivas más interesantes fue la de María del Mar Jiménez, una camarera de piso de 63 años que no tuvo reparos a la hora de compartir su realidad con el resto de colaboradores.
La mujer fue sincera con sus posibilidades para irse de vacaciones: "No tengo dinero para irme en verano. Me voy siempre con el Imserso, que me sale más barato".
Además, contó cómo al formar parte del sindicato Las Kellys, había tratado de buscar un tren a Barcelona para poder manifestarse con sus compañeras en busca de unas mejores condiciones.
Sin embargo, los precios que encontró acabaron por arruinar sus ilusiones de viajar.
"El día 25 es el 11.º aniversario de que nos formamos Las Kellys y hay una movida en Barcelona. Yo no puedo ir porque el tren me cuesta 300 euros ida y vuelta, más el hotel son 200 y pico", señaló la trabajadora.
Marimar fue tajante con su argumento: "Me sale el fin de semana por 1.000 euros y las Kellys no tenemos ese dinero".
Así, si un viaje para apoyar a sus compañeras se complica, irse de vacaciones aún más: "Para Las Kellys es ahora el trabajo más duro. Lo que no puedo hacer es pagar 1.000 euros por un hotel una semana y luego otros mil en comer. No me lo puedo permitir".
De hecho, Marimar habló alto y claro de las condiciones laborales que tienen las trabajadoras dedicadas a la limpieza de hoteles, señalando su sueldo y por qué ven necesario manifestarse.
"Es curioso que en los últimos 10 años ha subido la hostelería un 40% y a nosotras hace diez años nos pagaban un euro y medio por habitación. Diez años después nos siguen pagando un euro y medio. La cosa ha ido muy bien para los empresarios pero nosotras seguimos igual", declaró la mujer.
Las Kellys, el colectivo al que pertenece Marimar, nació en 2014 en redes sociales, mientras que se convirtió en asociación en 2016 y dos años después en sindicato. Su objetivo es reclamar mejores sueldos y condiciones para las trabajadoras, especialmente contra la externalización.
Según datos de Comisiones Obreras, se calcula que el 95,9% de las camareras de piso sufre síntomas de ansiedad, mientras que cuatro de cada diez tienen síntomas de depresión. Su realidad merece ser vista por todos.
