Concentración de protesta a las puertas del centro de salud Alamillo, en Sevilla.

Concentración de protesta a las puertas del centro de salud Alamillo, en Sevilla. Comisiones Obreras

Salud SUCESOS DE SEVILLA

Dos agresiones a sanitarios en Sevilla en menos de una semana: insultos y amenazas con machete

"El miedo se apodera de nuestros compañeros, que acuden a diario a su trabajo con el temor y la ansiedad de ser agredidos", dicen desde UGT.

Más información: Denuncian la agresión racista a una médica en Sevilla Este mientras la grababa con su móvil: "Vuelve a tu país"

Sevilla
Publicada
Actualizada

En menos de una semana, la capital andaluza ha sido el escenario de dos nuevas agresiones a sanitarios: una verbal y otra con un machete

El sindicato UGT ha denunciado una nueva agresión a un trabajador sanitario en la provincia de Sevilla. El incidente tuvo lugar este lunes en el centro de salud Puerta Este-Doctor Vallina.

Se trata de una agresión verbal a un profesional del servicio de Rayos, según detalló la organización sindical en un comunicado confirmado por fuentes del Servicio Andaluz de Salud (SAS).

UGT ha señalado que "el miedo se apodera de nuestros compañeros, que acuden a diario a su trabajo con el temor y la ansiedad de ser agredidos".

El sindicato ha responsabilizado de la situación a lo que considera una "mala política ante las agresiones, la falta de empatía, la nefasta gestión de los recursos humanos y la falta de contratación de profesionales".

De forma paralela, CCOO ha convocado una concentración a las puertas del centro de salud del Alamillo a raíz del intento de agresión con un machete sufrido el pasado 27 de agosto por otro profesional sanitario.

El trabajador logró evitar las heridas, aunque permanece de baja médica. El sindicato ha explicado que la protesta busca "rechazar lo ocurrido y exigir a la Consejería de Salud que garantice la seguridad de su personal".

En relación con este último caso, CCOO ha destacado que la actuación de su delegada sindical en el centro permitió que la baja fuese reconocida como accidente laboral, subrayando que, en estos supuestos, el SAS es "reticente a reconocerlo pese a que es un riesgo inherente al trabajo que se realiza".

Agresión racista

Las agresiones a sanitarios son continuas. De hecho, a finales de julio la Policía Nacional se vio en la obligación de desalojar de un centro de salud a una mujer que, según denunciaron desde el Sindicato Médico de Sevilla (SMS), agredió a una doctora y la grabó con el móvil, algo que está prohibido.

La supuesta agresora inquirió a la doctora a "volver a su país", tildándola de "mala médica", mientras "jaleaba" a los demás pacientes presentes en la sala de espera y "grababa su deleznable actuación con un teléfono móvil, algo totalmente prohibido por la ley".