
Una receta muy tradicional.
El plato rico en proteínas de las abuelas sevillanas que triunfa en todos los bares: fácil de hacer y en muy pocos pasos
Esta receta es una de las más demandadas en la capital hispalense debido a su increíble sabor y tradición.
Más información: El plato típico de País Vasco que no se come en el resto de España: rico en proteínas, potasio y listo en pocos minutos
- Total: 1 h
- Comensales: 4
La ensaladilla rusa es una de las tapas más emblemáticas de la gastronomía sevillana, omnipresente en bares, ferias y reuniones familiares, nunca falta este plato como entrante principal.
Y es que aunque muchos tienen dudas de cuál es su verdadero origen, en Sevilla se ha convertido en todo un emblema. Y es que su indiscutible sabor y la perfecta combinación de ingredientes lo han convertido en toda una tradición muy querida en la ciudad.
Esta receta, elaborada con patata cocida, atún, mayonesa, guisantes, zanahoria y huevo duro, es ideal como tapa o primer plato, especialmente cuando se sirve muy fría, como mandan los verdaderos cánones sevillanos.
Ingredientes para una auténtica ensaladilla
- 4 patatas medianas
- 2 zanahorias grandes
- 100 g de guisantes (pueden ser congelados o en conserva)
- 2 latas de atún en aceite de oliva (bien escurridas)
- 3 huevos
- 300 g de mayonesa (casera o de buena calidad)
- Sal al gusto
Paso 1
Comenzamos pelando las patatas y las zanahorias. Las cortamos en dados pequeños y las cocemos juntas en una olla con abundante agua y sal. Es importante que la patata quede cocida pero firme, sin deshacerse. En otra cacerola, cocemos los huevos durante unos 10 minutos desde que el agua empiece a hervir, hasta que estén duros. Al mismo tiempo, cocemos los guisantes si son frescos o congelados (si son de lata, simplemente se escurren bien).
Paso 2
Una vez que las patatas, zanahorias y guisantes estén listos, los escurrimos con cuidado y los dejamos enfriar completamente. Lo mismo hacemos con los huevos duros, que pasamos por agua fría, pelamos y picamos, reservando una parte para decorar si se desea.
Paso 3
En un bol grande, mezclamos con suavidad la patata, la zanahoria, los guisantes, el atún desmenuzado y los huevos picados. Añadimos sal al gusto y, poco a poco, vamos incorporando la mayonesa. Lo ideal es que la mezcla quede cremosa pero no excesivamente cargada de mayonesa: buscamos una textura suave y ligada, sin que pierda cuerpo.
Paso 4
Una vez mezclada, cubrimos la ensaladilla con film transparente y la llevamos al frigorífico al menos un par de horas. Y es que en Sevilla este detalle no se negocia, la ensaladilla debe servirse muy fría, casi helada, para que sea refrescante y sabrosa, especialmente en los días de mucha calor.
Sin embargo, este plato no es solo un manjar de la capital, sino que tiene numerosos beneficios para la salud. Y es que es rico en carbohidratos complejos, gracias a las patatas, que proporcionan energía duradera y estable.
Además, el atún es una excelente fuente de proteínas magras, esenciales para el crecimiento y la reparación de tejidos. Por otro lado, las zanahorias y los guisantes son ricos en vitamina A, un nutriente fundamental para mantener la salud ocular y fortalecer el sistema inmunológico.

Un plato muy demandado en la mesa.
Se puede servir en una fuente grande o en raciones individuales, decorada con una capa fina de mayonesa por encima, unas tiras de pimiento morrón, aceitunas o rodajas de huevo duro. Como tapa, suele acompañarse con picos o regañás, y como primer plato, basta con una pequeña ensalada al lado.
Y es que en los largos días de verano, está claro que esta tradicional receta sevillana es un clásico que nunca falla en las mesas.