El próximo viernes se estrena en cines Wish: El poder de los deseos, la nueva película de Walt Disney Animation Studios y una comedia musical que transporta al público al reino mágico de Rosas, una isla fantástica ubicada en el extremo sur de la península ibérica. La película que celebra el centenario del estudio de animación ha elegido este lugar para situar la historia, por ser el punto de encuentro de numerosas culturas que han dejado su huella en la arquitectura, la música y las costumbres de esta zona concreta.
Cuenta la historia de Asha, una optimista con mucho ingenio que pide un deseo tan potente que le responde una fuerza cósmica, una pequeña bola de energía ilimitada llamada Estrella. Juntas, Asha y Estrella se enfrentan a un imponente enemigo, el Rey Magnífico, gobernante de Rosas, para salvar a su comunidad y demostrar que cuando la voluntad de una persona conecta con la magia de las estrellas, pueden ocurrir cosas maravillosas.
En la nueva película de Disney visitaremos el reino de Rosas, un lugar en el que identificaremos vestigios de arquitectura de la época medieval de la península ibérica a través de los grandes arcos ciegos de medio punto o por la forma en la que llaman la atención los azulejos esmaltados formando patrones. Dos ejemplos que forman parte de algunas decisiones creativas que no son casuales y que se inspiran en muchos monumentos de España, como el Alcázar y la Torre del Oro de Sevilla, la Mezquita de Córdoba o la Alhambra de Granada.
España como inspiración
"Dada la situación de Rosas, sería lógico que tuviera influencias del norte de África y el sur de Europa. También pensamos que las personas que viajaron por La Ruta de la Seda podrían terminar allí”, aseguraba la directora Fawn Veerasunthorn, que también contaba cómo el equipo recurrió a expertos para asegurarse de que sus referencias transmitieran una sensación de autenticidad.
"Trabajamos con asesores culturales sobre la ropa y la moda de la época. Y también trabajamos con el profesor de antropología histórica sociocultural de la UCLA Aomar Boum para asegurarnos de que el cruce de influencias culturales que tuvo lugar en la región durante la Edad Media quedase bien representada".
Fotograma de 'Wish: el poder de los deseos'.
Sobre este tema, la diseñadora de producción Lisa Keene dijo que la ubicación fue también una elección estratégica. "El objetivo de esta narración era crear un lugar que permita a todos en el mundo participar en la historia del origen de un cuento de hadas: la idea de pedirle deseos a una estrella es universal. Fue un esfuerzo consciente para asegurarse de que hubiera muchas culturas presentes entre el pueblo de Rosas", explicó.
Localizaciones y banda sonora
Por otro lado, los creadores hablaron del castillo del Rey Magnífico, que también recoge algunas referencias arquitectónicas españolas. El diseñador de producción de la película David Womersley sabía que el aspecto del castillo del rey tenía que ser especial porque los castillos de Disney se convierten en iconos. Y, entre muchas otras inspiraciones, los artistas se sintieron atraídos por la Torre del Oro, situada a orillas del río Guadalquivir en Sevilla, una torre dodecagonal -de 12 lados- que fue construida a principios del siglo XIII.
"El castillo de Magnífico se ve diferente a todo lo que hemos hecho anteriormente en películas de Disney", señaló Womersley. "Está hecho de hermosa piedra caliza, el tipo de piedra que se ve en todo el Mediterráneo. Tiene contrafuertes y un observatorio de techo cónico de 12 facetas donde Magnifico guarda todos los deseos".
Además, Wish: el poder de los deseos también se inspiró en la cultura española a la hora de componer la banda sonora, sirviéndose de guitarras españolas y castañuelas para animar las canciones compuestas por Julia Michaels y Benjamin Rice con la música de Dave Metzger.
Y para apoyar las referencias españolas de la película, el prestigioso bailarín y coreógrafo español Antonio Najarro trabajó con Disney en la tarea de crear las coreografías de algunas de las canciones, desde la danza española y el flamenco, incluyendo movimientos de danza clásica e introduciendo algunos movimientos contemporáneos para hacer la coreografía más creíble y moderna.
"Para la canción 'Bienvenidos a Rosas', creé una coreografía nueva y original con diez bailarines de mi compañía de danza -la Compañía Antonio Najarro-, incorporando muchos estilos diferentes de baile: danza española, flamenco, danza contemporánea, ballet clásico y más. Me inspiré en muchos elementos españoles diferentes: instrumentos de percusión como las castañuelas, zapateados flamencos para el juego de pies, el movimiento de las faldas flamencas, todo basado en el verdadero espíritu del flamenco", detallaba.