El 2022 seriéfilo estará marcado por el regreso de dos de las marcas más populares, premiadas y respetadas en la cultura pop del siglo XXI: El señor de los anillos y Juego de tronos. El estreno en Amazon Prime Video y HBO Max de las series Los anillos de poder y La casa del dragón devuelven a la misma conversación a dos universos narrativos relacionados desde sus orígenes. Aunque su tono y su aproximación a la violencia y el sexo no encajarían nunca en la Tierra Media, es difícil de creer que George R. R. Martin hubiera sido capaz de sacar adelante la saga de Canción de Hielo y Fuego sin la seminal influencia de la obra de J.R.R. Tolkien. Mientras contamos los días para el estreno de ambas precuelas, es la hora de comparar las expectativas sobre las dos series destinadas a dominar la conversación audiovisual este año.

El legado de sus franquicias 

El señor de los anillos hizo historia en Hollywood, desde sus orígenes (la revolucionaria apuesta de New Line Cinema de rodar tres películas de forma consecutiva sin saber siquiera si la primera iba a ser un éxito) hasta sus resultados (arrasando en taquilla y en los Oscar, con El retorno del rey logrando un pleno histórico de 11 estatuillas). Peter Jackson enamoró a críticos, fans y público en general con una ejemplar adaptación de una de las historias más influyentes y populares de la historia de la literatura. El problema llegó con el regreso a la Tierra Media. El director neozelandés tuvo que encargarse a regañadientes de la adaptación cinematográfica de El hobbit después de que un harto Guillermo del Toro abandonara la producción por culpa de los incesantes retrasos en el rodaje. La decisión de convertir un pequeño libro de aventuras en una nueva trilogía fue tan desastrosa como la ocurrencia de rodar las películas a 48 fotogramas por segundo. Comercialmente las películas fueron un éxito, pero el sabor de boca que dejaron fue amargo. 

Cuando parecía que Perdidos iba a ser el último gran fenómeno colectivo y social de la televisión moderna, apareció la adaptación de Juego de tronos para destrozar cualquier expectativa y llevar la popular y todavía inacabada serie de novelas de George R. R. Martin a la pequeña pantalla. Temporada a temporada, las audiencias y los premios fueron creciendo exponencialmente hasta llegar a unas últimas temporadas que ya no tenían como base los libros del escritor. Justa o injustamente, la acelerada temporada final de la serie estrella de HBO estuvo a punto de dinamitar el extraordinario legado que había construido durante una década. 

Punto para: Ninguna. Los últimos contactos del público con ambas historias fueron decepcionantes. Por suerte, tanto Jackson como la pareja profesional formada por David Benioff y D. B. Weiss están fuera de las continuaciones de los imperios audiovisuales que ambos ayudaron a construir. 

Los nombres implicados 

Los showrunners de La casa del dragón son Ryan Condal, el creador de la serie de culto sci-fi Colony, y Miguel Sapochnik, el director de los capítulos más emblemáticos de Juego de tronos. El propio George R.R. Martin es productor ejecutivo de la serie y escribió el piloto de este spin-off junto a Condal. En el reparto los principales reclamos serán Matt Smith (The Crown), Olivia Cooke (Bates Motel), Emma D'Arcy (Truth Seekers), Steve Toussaint (Prince of Persia. Las arenas del tiempo) y Rhys Ifans (Notting Hill). 

El español Juan Antonio Bayona es el único nombre destacado delante y detrás de las cámaras. La serie de fantasía será el primer guion que ve la luz de J.D. Payne y Patrick McKay, una pareja de amigos que reescribieron los libretos de Star Trek: Más allá y Jungle Cruise, aunque sus aportaciones no fueron suficientemente significativas como para aparecer en los créditos. J.J. Abrams les encargó escribir Star Trek 4, pero el proyecto no salió adelante por culpa de los contratos de los actores. En el vasto elenco de Los anillos del poder los actores más conocidos son los encargados de dar vida a versiones más jóvenes de Galadriel y Elrond: Morfydd Clark (Saint Maude) y Robert Amarayo (un joven Ned Stark en Juego de tronos). 

Punto para: A pesar de las ganas de ver ese prólogo dirigido por Bayona, La casa del dragón se lleva cómodamente este apartado. 

Las imágenes que ya hemos visto 

La casa del dragón fue la primera que decidió mostrar sus cartas en octubre del pasado año. El primer teaser mantenía el estilo visual de Juego de tronos gracias a la puesta en escena de un clásico como Sapochnick y presentaba los nuevos símbolos y personajes destinados a dominar la narrativa de la precuela. El reconocible look de los Targaryen y las escenas de lucha ayudaban a subrayar esa sensación de proyecto de vocación claramente continuista. Es una presentación más sencilla que la de su rival, pero también menos dependiente de los efectos visuales. En definitiva, un buen avance que tampoco enseña nada particularmente memorable por lo que empezar a morderse las uñas. 

La celebración de la Super Bowl fue el escenario escogido para enseñar por fin las primeras imágenes del regreso a la Tierra Media. El espectacular teaser era una efectiva presentación a medio camino de lo viejo y lo nuevo con momentos tan poderosos como la escalada de Galadriel, un hombre misterioso que juega con fuego, un humano en peligro en mitad de una tormenta o un elfo agarrando una flecha con su mano y devolviéndosela a su rival. Prime Video supo dejarse lo mejor para el final: una mano humana sostiene la mano de un niño pequeño... o de una raza anterior a los hobbits. La única pega del avance fueron unos efectos especiales algo cantosos que tenían tanto de El señor de los anillos como de la posterior adaptación de El hobbit, cuyo uso del CGI fue criticado en cada entrega. Después de series como The Mandalorian, no aceptamos menos que cromas de menor nivel. 

Punto para: El señor de los anillos: Los anillos del poder. A pesar de las críticas recibidas por los efectos visuales, la presentación en la Super Bowl fue el avance que más ganas deja de descubrir los caminos que seguirá la primera adaptación televisiva el universo creado por Tolkien. 

El camino narrativo que han decidido continuar 

Tanto Juego de tronos como El señor de los anillos han decidido viajar al pasado para seguir explorando sus universos narrativos. La casa del dragón retrocede 200 años antes de la caída del trono para contar la historia de los Targaryen con la novela Fuego y sangre como principal referente. En el caso de Los anillos del poder, la serie trasladará por primera vez a la pantalla la Segunda Edad de la Tierra Media para hablar de la forja de los anillos, el ascenso del Señor Oscuro Sauron, la leyenda épica de Númenor y la Última Alianza de elfos y hombres. A pesar de que no pueden contradecir la mitología ya especificada por la obra de Tokien, los showrunners Payne y McKay tienen más libertad para explorar una parte no contada ni siquiera en El Silmarilion. 

Punto para: El señor de los anillos: Los anillos del poder. Con la información que tenemos actualmente, parece más original y abundante el material de partida de la serie de Prime Video. Reencontrarse con los Targaryen siempre es un placer, pero Sapochnick y Condal deben asegurarse que hay vida más allá en su serie del clan más inestable de Poniente. 

Sensación general 

A los puntos, El señor de los anillos: Los anillos del poder se impone por la mínima a su gran rival por reinar en la conversación seriéfila durante los próximos años. Es demasiado pronto para emitir sentencias apresuradas. Por el momento solo hemos visto un primer teaser de ambas producciones y tanto Prime Video como HBO Max han decidido reservarse la mayoría de giros argumentales de las nuevas series estrella de su programación. Seguimos expectantes por ver qué nos depararán Poniente y la Tierra Media. Promete ser un duelo apasionante.

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