Juan Sumer. Ese es el pseudónimo favorito que Juan Carlos I ha usado una y otra vez a lo largo de su vida. Dicen las malas lenguas que fue la mismísima Bárbara Rey la que se lo inventó y que a él le hizo tanta gracia que empezó a usarlo para poder registrarse en hoteles, adquirir billetes e incluso ingresar en hospitales sin que nadie supiera quién era en realidad el alojado en el registro de entrada. 

El apellido, acrónimo Su Majestad El Rey, unido a su primer nombre le ha servido para despistar a los medios de comunicación como ocurrió en 2010 cuando ingresó en el Hospital Clinic de Barcelona, donde el 8 de mayo se le extirpó un nódulo del pulmón.

Ese mismo nombre es el que uso para volar el pasado 3 de agosto desde Oporto, Portugal, hasta Abu Dabi, en un viaje que dura ya más de tres meses y que parece no tener retorno. Al parecer, ese mismo pasajero está buscando ya nuevo destino porque no puede pasar más tiempo en Emiratos Árabes Unidos: el aburrimiento y la soledad se han convertido en una losa demasiado pesada para el exjefe del Estado. Aunque en los últimos días una novedad ha llegado a la capital y se encuentra un poco más animado. ‘Fernando Alonso ha comenzado las pruebas con su nuevo coche de Fórmula Uno para la temporada que viene y se quedará un par de días probándolo en el circuíto, así que su idea es ir a verle entrenar y eso le anima’ nos cuenta uno de los pocos amigos que le quedan al emérito y con el que habla vía telefónica de forma regular.

Pero el piloto asturiano será un entretenimiento temporal porque termina sus pruebas en el circuito este lunes y Juan Carlos volverá a la soledad de sus lujosas habitaciones del hotel ‘Emirates Places’ donde se aloja. Así que Juan Sumer busca nuevo destino para su exilio porque la posibilidad de volver a España el 14 de noviembre, como era su deseo para participar en la última regata de la temporada en el Real Club Náutico de Sanxenxo (Pontevedra), desapareció en el mismo momento en el que su abogado, Sánchez Junco le llamó por teléfono para contarle que la Fiscalía del Tribunal Supremo llevaba desde 2019 investigándole por el uso de unas tarjetas de crédito vinculadas a cuentas bancarias de las que no era titular. Esta cusa que se une a la investigación por el supuesto cobro de comisiones del AVE a La Meca.

Regreso a Zarzuela

El mapa de los posibles movimientos del emérito.

Ahora el padre de Felipe VI busca un lugar para continuar con lo que él había llamado vacaciones, pero que todo el mundo asume ya como un exilio forzado. Entre sus posibles destinos está Florida en Estados Unidos o República Dominicana, ambos bajo la generosidad y hospitalidad de sus amigos los hermanos Fangul, más en concreto de Pepe, que hace poco revelaba en una entrevista para un medio de comunicación americano que hablaba cada día con él por teléfono y que su amigo don Juan Carlos, mantenía la esperanza de regresar a Zarzuela.

"Él siempre dice que va a volver. Ahora, ¿cuándo? No lo sé. Espero que pronto. Él sabe que en mi casa está invitado. Cuando quiera. En Palm Beach, en Casa de Campo o en el barco. Tenemos planes de viaje constantemente. Pero siempre hemos hablado de visitas, no de vivir en el otro lado. Para él su residencia es España y siempre lo será", sentenciaba el empresario apodado como el rey del azúcar.

Sin embargo, fuentes cercanas a Zarzuela no lo tiene tan claro. "Siento utilizar esta expresión pero es la que más se ajusta a la realidad de Juan Carlos I. Éste sólo vuelve ya con los pies por delante. Si es que cada día es una cosa distinta y me temo que esto no acaba más que empezar. Hemos tenido muchos viajes, muchas cacerías y muchas cosas y si empiezan a salir habrá que empezar otra vez a achicar agua y remar para que no se hunda el barco (haciendo referencia a la Casa Real)", puntualizan. 

Porque lo cierto es que con el emérito lejos parece que los escándalos rozan menos las vallas del complejo de El Pardo. Aunque me parece que el ejecutivo de Pedro Sánchez, encabezado por su Vicepresidente Segundo, el republicano Pablo Iglesias vaya a olvidarse del tema. El último en recordarlo fue el ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, que aseguró en una entrevista en televisión que afrontar la reforma de la inviolabilidad del Rey Juan Carlos I "al socaire" de "acontecimientos puntuales" como los que afectan actualmente al emérito no se contempla, porque, a su juicio, legislar "en caliente" hace que se pierdan "los detalles y los perfiles". Eso sí, ha augurado que el asunto se tratará en el porvenir con un “debate sereno”, aunque sin concretar el plazo.

Preocupación por Felipe VI

Felipe VI y Juan Carlos I.

La gran pregunta es cómo salvar a Felipe VI del naufragio del rey anterior, cuyo nombre aparece recogido en la Constitución. El siguiente entrecomillado sale de la boca de una persona próxima a Felipe VI, próxima físicamente y afectivamente. Un colaborador preocupado por el futuro de la institución y del actual Rey, un monarca centrado en sus obligaciones institucionales. 

"La cosa pinta tan mal que parece que ya nadie duda de que algo habrá que hacer algo más. El primer movimiento fue el 15 de marzo cuando vía carta el propio Felipe VI renunciaba a la herencia de su padre y anunciaba la retirada de su asignación económica procedente de los Presupuestos de la Casa. Fue un gesto del que ya nadie se acuerda y se ha quedado corto. Y la distancia entre Madrid y Abu Dabi también se está haciendo pequeña para los de dentro". "Se está planteando la opción de que renuncie de una vez por todas al título de rey, lo que sería un tremendo disgusto tanto para el padre como para el hijo. Pero cada vez se está poniendo más difícil, el equipo tiene que conseguir anticiparse a los acontecimientos. Quizá una buena estrategia sería acabar con algunos aislamientos que hacen que la Corona viva al margen de las reglas de funcionamiento de las instituciones democráticas y eso está dentro de la normativa de la Casa".

"Durante años ha sobrevivido en el equilibrio y cualquier desliz hace que la balanza se torne hacia lados que no queremos. Y esto del ex Jefe ya no se pueden llamar deslices son verdaderas bombas. Cuando, además, en el Gobierno tienes al enemigo como socio del Ejecutivo y no paras de darles munición para que dispare a una diana tan fácil como la figura de un Rey… Pues todo hecho".

"De seguir la situación como está, el padre debería permanecer lejos, incluso morir si llega el momento y ya se verá cómo se soluciona cuando empiece a salir lo del resto porque no creo que una cría como Vicky (se refiere a la hija pequeña de la Infanta Elena, Victoria Federica) haya sido la que más se haya beneficiado de la generosidad del mexicano y sus tarjetas".