El barrio de A Coruña cuyos edificios y calles tienen nombres marítimos
Coruña secreta: El barrio donde el mar nombra las calles y los edificios
En los 80 la zona era conocida como Polígono de Adormideras y lo que no muchos saben es que todos sus edificios tienen nombres relacionados con el mundo del mar, al igual que las calles. Algunos de los bloques fueron diseñados por el arquitecto coruñés Andrés Fernández Albalat
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El barrio de Adormideras en A Coruña goza de una posición estratégica y privilegiada frente al mar, flanqueado por la Torre de Hércules, la playa de San Amaro y el Paseo Marítimo.
En los 80, cuando se colocaron los primeros cimientos, la zona era conocida como Polígono de Adormideras y lo que no muchos saben es que todos sus edificios tienen nombres relacionados con el mundo del mar, al igual que las calles.
Incluso algunos de los bloques de viviendas fueron diseñados por el arquitecto coruñés Andrés Fernández Albalat, la figura más representativa de la modernidad en la arquitectura de la comunidad en la segunda mitad del siglo XX.
Calle Regata Cutty Sark.
En un recorrido por las calles de esta zona, se puede encontrar el edificio Paseo Marítimo, el Balea, el San Amaro (con portales adornados con vinilos de la Torre de Hércules), el Lagoa, O Mar o Touliña.
En esta línea, es de destacar que Touliña se refiere a un tipo de delfín, el delfín mular; además de que el edificio balea hace referencia a este animal importante en la historia de Galicia y el mar, especialmente en zonas como Malpica, donde en su momento la caza de ballenas fue el principal sustento económico para muchos.
Escudo marítimo en piedra en un edificio de Adormideras.
En cuanto a Lagoa, no se conoce la referencia exacta por la que el bloque residencial fue bautizado así, pero en Galicia, existen varias lagunas con una relación histórica con el mar como la Lagoa de Antela, la de Traba, la de Louro o da Serpe.
Sobre las calles, la Juan Sebastián Elcano recuerda a este marino español célebre por conseguir la primera Circunnavegación de la Tierra de la que se tiene constancia, una de las mayores gestas marítimas de la historia de la navegación.
Edificio Balea.
El edificio San Amaro, junto a la playa del mismo nombre ubicada en el barrio, recuerdan a este peregrino, que emprendió un largo viaje en busca del Paraíso Terrenal. En Galicia hay santuarios y ermitas dedicados a esta figura y se le considera patrón de caminantes, peregrinos, ancianos y viajeros.
La plaza Blanca Quiroga es en honor a la primera embarcación de Salvamento Marítimo de España que está actualmente expuesta en el parque de Bens de la ciudad herculina. Tuvo un importante papel en catástrofes como la de los petroleros Mar Egeo y Urquiola.
Edificio O Mar.
El Paseo Serpent hace mantener vivo el recuerdo del HMS Serpent, un crucero de la Marina Real Británica que en 1887 se hundió en la punta de Boi, en la costa de Camariñas en el corazón de la Costa da Morte, llevando en su interior 1770 toneladas, fundamentalmente de equipo militar. En este siniestro, ocurrido en su viaje inaugural, solo sobrevivieron tres de un total de 175 tripulantes.
Edificio Lagoa.
La calle Regata Cutty Sark debe su nombre a esta popular competencia internacional de grandes veleros en la que participan jóvenes de diferentes países y que fue fundada en 1956, debiendo su nombre al patrocinio de esta marca de whisky. También recibía este nombre el histórico barco de vela considerado el más rápido del siglo XIX y que se conserva a día de hoy en un museo londinense.
Asimismo, en algunas de las fachadas son visibles grandes escudos de piedra con representaciones de barcos.
Calle Juan Sebastián Elcano.
Crecimiento en menos de una década
Los primeros vecinos de Adormideras consideran que el barrio desde sus inicios creció rápidamente, exactamente en unos 10 años, dado que se pasó de una zona en la que no había ningún tipo de servicio básico, con numerosos solares vacíos y en la que tardó en llegar el servicio de autobús urbano a ser un área con grandes bloques de viviendas.
En los inicios, los edificios no tenían números y por eso se les bautizó con nombres marítimos para poder distinguirlos. Hace décadas en el barrio hubo una cantera, además de una depuradora de agua frente al hotel y en la zona de la playa un cargadero de piedra.
Algunos vecinos veteranos que llevan toda su vida en la zona rememoran incluso que unos vagones transportaban la piedra hasta el dique de abrigo, donde se encuentra la torre de control que se conoce coloquialmente como H y que en el mar fondeaban lanchas de pequeño tamaño.