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Mercado de As Conchiñas: 50 años surtiendo productos locales en el Agra do Orzán de A Coruña

Los clientes fieles y el trabajo diario de los responsables de los puestos que cada día, de lunes a sábado por la mañana, abren sus negocios mantienen vivo un espacio en el que es posible encontrar productos de calidad como pescado, carnes, pan, lácteos o frutas y verduras
El Mercado de As Conchiñas, en el Agra del Orzán de A Coruña.
López
El Mercado de As Conchiñas, en el Agra del Orzán de A Coruña.
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Los mercados no son solo un lugar donde surtirse de productos locales, sino también un punto de encuentro para los vecinos y comerciantes que aprecian los artículos de calidad. El Mercado de As Conchiñas, ubicado en el Agra do Orzán de A Coruña, lleva desde los años 70 ofreciendo este servicio a los residentes en la zona, que pueden acudir a este espacio de 08:15 a 15:00 horas de lunes a sábado.

Con una superficie de 5.000 metros cuadrados repartidos en tres plantas, este mercado coruñés dispone de medio centenar de puestos de los que 40 están ocupados y los 10 restantes, disponibles, según los datos proporcionados por el ayuntamiento. Precisamente, son los responsables de estos negocios con su esfuerzo y dedicación, junto a sus fieles clientes, los que dan vida a un espacio que en los últimos años ha perdido puestos.

Ubicado en la intersección de la calle Barcelona con la avenida Conchiñas, este espacio se encuentra a poca distancia de la Ronda de Outeiro y es frecuentado por numerosos vecinos del barrio, aunque no muchos jóvenes. Precisamente, este es uno de los aspectos que más lamentan los responsables de los puestos, que echan de menos que la gente mantenga el hábito de apostar por el comercio local y los productos de proximidad como los que ellos ofrecen.

Una zona de pescadería del Mercado de As Conchiñas con varios puestos vacíos (Quincemil).

Los jóvenes no solo se echan de menos a la hora de comprar, sino también en cuanto al relevo generacional se refiere. Los puestos que cierran en As Conchiñas por jubilación o por motivos económicos raramente vuelven a abrir, dejando estampas con varios espacios completamente vacíos.

Esto es especialmente reseñable en la planta superior, donde se ubican las pescaderías. Llenas de producto adquirido en la Lonxa da Coruña, ofrecen pescado y marisco fresco de calidad. Y de calidad también son las carnes disponibles en la primera planta, donde también se ubican pollerías, fruterías y la única panadería del mercado. En Quincemil nos hemos desplazado hasta esta plaza y hemos conversado con alguno de ellos.

Panadería Beni

Beni Godoy lleva más de 35 años trabajando en esta panadería de la que se hizo cargo tras la jubilación de su jefa y que ahora es la única del mercado tras la desaparición de las otras cinco o seis que había. "La gente no tiene la costumbre de venir a la plaza. La gente joven que viene los sábados es porque vinieron sus padres y están acostumbrados", explica la dependienta, que reivindica la calidad de los productos que se comercializan en la plaza.

"Todo lo que traigo es artesano, de pueblecitos, y no se puede encontrar en el súper. Es de panaderías pequeñitas que tienen especialidades, como la trenza de Carballo o los bizcochos de Paiosaco", explica la dependienta. El pan, por supuesto, es artesano, hecho con masa madre y en hornos de leña, y los bizcochos son caseros, sin ningún tipo de aditivos, algo que valoran especialmente los fieles clientes de Beni.

Alimentación Rivas

Alimentación Rivas centra desde hace 40 años sus ventas en el pollo, aunque desde 2017 amplió la oferta con charcutería, carne de cerdo o productos curados. Un negocio familiar que tiene una clientela fija, "coma da casa", que confía en el producto que primero su madre (que se va a jubilar) y desde hace 26 años Marcos Candá Martínez les vende.

Un relevo generacional que es una excepción en la tónica general del mercado, donde los puestos tienden a cerrar en vez de a pasar a otras manos que quieran dedicarle tantas horas y esfuerzo. Candá, por otro lado, atribuye el hecho de que sean los mayores los que más acudan a la plaza a la libertad horaria, que no permite a los más jóvenes visitar el mercado por sus trabajos o estudios y que hace que vayan más el sábado por la mañana.

Pescadería Rías Baixas

La Pescadería Rías Baixas lleva "toda la vida" en el Mercado de As Conchiñas, donde la abuela de Marco Antonio Rodríguez García, que cogió el negocio en 2008, ya dispensaba productos del mar a sus clientes. "É un negocio familiar de sempre. Hai clientes de toda a vida e tamén novos que van vindo", explica el responsable del negocio, que comercializa especies de la Lonxa de A Coruña.

Rodríguez considera que lo ideal hubiese sido hacer un mercado a pie de calle, más cerca de los vecinos. Esto facilitaría la accesibilidad, pero también darle más visibilidad a un espacio que no es abierto y que no se distingue con facilidad desde el exterior.

Frutas y Verduras María

María regenta esta frutería pero es Roberto Cancela, un empleado, el que habla con Quincemil. "Somos a terceira xeración. Dimos un impulso con redes sociais e levando a domicilio", explica Cancela, que indica que son los jóvenes los que más apuestan por esta opción, mientras que los mayores acuden al mercado.

El dependiente asegura que la tendencia es que se cierren los puestos, pero no que abran. "A situación económica tanto do barrio como xeral non axuda e hai que ir aguantando, non queda outra", indica Cancela. Estos fruteros, al igual que otros vendedores, apuestan por productos de proximidad como la verdura de A Laracha o las patatas de Coristanco, así como por la cosecha propia, como las calabazas.

Pescadería Merce

Mercedes Fondo lleva desde el 2009 en su puesto del Mercado de As Conchiñas, donde vende producto de temporada. "Agora mesmo o que máis sae é o centolo, a pescadilla, a merluza, a lubina, o sargo, o salmón que teño todos os días...", enumera la responsable de la pescadería. Una amplia variedad entre la que se pueden encontrar una veintena de especies que hace que sus clientes siempre tengan donde escoger.

Fondo también hace referencia a los puestos cerrados e indica que hace unos años, en el pasillo en el que se encuentra ella, estaban ocupados y que ahora solo quedan cuatro: "Eso é de xente que se xubila e xa non o colle ninguén. Cando alguén marcha, queda pechado". La competencia de supermercados o grandes superficies ha hecho, según la responsable de Pescadería Merce, que los ciudadanos apuesten menos por el mercado local, aunque sus clientes, la mayoría del barrio, son fieles.

Charcutería Selecta

Charcutería Selecta es el nombre que la aplicación Just Eat le ha dado al puesto de Margarita Díaz Piñeiro, que no ha sido "bautizado" oficialmente, debido a la calidad de sus productos. Esta dependienta regresó el pasado mes de junio al Mercado de As Conchiñas tras tres años como responsable de un negocio en el centro de A Coruña, que a su vez abrió tras haber estado en la plaza durante 18 años con Un país de queixo.

Díaz destaca que uno de los productos que más gusta a sus clientes es el queso que hace Josefa en su casa de una aldea de Sobrado dos Monxes, aunque también triunfan los productos de Lalín para el cocido. La dependienta reconoce, al igual que los responsables del resto de los puestos, que son los más mayores los que mantienen vivo el mercado.

Pescadería

Las pescaderías situadas en la parte superior venden diferentes especies. Una ubicada en la parte trasera del mercado está regentada por una mujer que asegura que hay poca gente que se acerque al mercado a comprar, aunque las ventas fluctúan y los clientes son tanto vecinos del barrio como residentes en municipios colindantes como Arteixo.

Sobre los puestos vacíos, la responsable de esta pescadería asegura: "Os que estamos xa estamos, pero os que cerraron non volven a abrir nin se collen os postos, porque non dá". La gerente de este puesto que lleva desde la década de los 80 en el mercado indica que en los últimos tres o cuatro años la situación ha empeorado.

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