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Quejas en la calle Olmos de A Coruña por cascotes y basura acumulada tras un desprendimiento

Comerciantes, hosteleros y vecinos aseguran haber trasladado su malestar al ayuntamiento y lamentan la imagen que esta situación, arrastrada desde hace semanas, da de la ciudad a los turistas que la visitan
Cascotes y suciedad acumulada en la calle Olmos de A Coruña.
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Cascotes y suciedad acumulada en la calle Olmos de A Coruña.
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Vecinos y comerciantes de la calle Olmos de A Coruña han manifestado su malestar por la acumulación de basura frente a un edificio en el que el pasado mes de noviembre se produjo un desprendimiento de cascotes. La zona frente a la que se produjo el incidente está acordonada por seguridad, pero los restos no han sido retirados y algunos ciudadanos han depositado latas, entre otros objetos.

Los hosteleros y comerciantes lamentan que esta situación daña la imagen no solo de la calle, sino también de la ciudad en una época en la que A Coruña recibe muchas visitas. "Ahí al lado hay una alcantarilla y en cuanto llueve, todo lo que está acumulado bloquea el agua que va hacia ella", lamenta uno de los hosteleros de la zona.

"Lo que no puede ser es que se convierta en un basurero", denuncia la propietaria de Biján, Montse Iglesias. Algunas personas han dejado sobre los cascotes elementos como latas o botellas, generando una situación de "insalubridad" que preocupa a los residentes y a los trabajadores de la calle Olmos, aunque fuentes municipales señalan que se procederá a reponer vallas y a la "limpieza".

Preocupación por el estado del inmueble

"Confío en que esta alcaldesa tiene que verlo. Es una mujer resolutiva, que avanza, y creo que en breve nos tiene que mirar eso", comenta la responsable de Biján, negocio que lleva unos 30 años en esta céntrica calle. Iglesias lamenta que los turistas que visitan A Coruña se lleven esta imagen de la ciudad y no lo bonita que realmente es la ciudad.

Hosteleros, comerciantes y vecinos de la zona se han puesto en contacto con el ayuntamiento y el 010 para informar de la situación. Precisamente, uno de ellos asegura que ayer martes operarios colocaron de nuevo las vallas que habían sido desplazadas para mantener el área de seguridad, aunque todavía están esperando a que alguien retire los restos acumulados.

El mal estado del edificio preocupa a los responsables de los negocios situados en las inmediaciones y a los vecinos. Una preocupación de la que también se ha echo eco el BNG de A Coruña, que recuerda que el inmueble alberga unos murales de Urbano Lugrís y ha exigido al Gobierno local que proteja este "tesouro artístico".

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