Tecnología

Así respondería nuestro cerebro al teletransporte

26 febrero, 2016 20:24

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Desplazarse de un lugar a otro en cuestión de milisegundos, es propio de los dibujos animados y de las novelas de ciencia ficción. El teletransporte es una idea que hace unos años nos parecía descabellada, pero con los impresionantes avances que curten de forma progresiva las diferentes disciplinas de la física, va tomando un aspecto mucho más posible.

Aun así, existen ciertas limitaciones, al transportar la materia tendríamos que primero descomponerla y luego recomponerla. Si se tratase de un ser inerte, no aparecería este problema, pero cuándo hablamos de organismos vivos, sería difícil de concebir que durante un tiempo estaríamos literalmente ‘apagados’, es decir, nuestro sistema nervioso se desconectaría durante un determinado tiempo. ¿Moririamos? ¿perderíamos nuestra memoria y recuerdos? ¿tendríamos un simple mareo?

Poniendo a prueba el cerebro

Tokyo-Hotaru-photo-by-makure-1 (1)

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Arne Ekstrom, profesor asociado del

“Conocemos que mientras nos desplazamos, se dispara un ritmo en nuestro cerebro para mantenernos en nuestro camino, al igual que cuándo aprendemos de algo. Lo que no sabemos, es si este ritmo se dispara por un factor externo, o un proceso de aprendizaje.” Dice Ekstrom.

Ekstrom y su equipo, junto a Lindsay Vass y Milagros Copara, pudieron poner una solución a este problema, trabajando con un grupo de pacientes que padecían de epilepsia severa. La cirujana Kia Shahlaie implantó electrodos en sus cerebros, para identificar la actividad cerebral durante los espasmos y poder así plantear su tratamiento.

Las oscilaciones en la actividad cerebral esconden la clave del teletransporte

Entre convulsiones, los electrodos recogieron una actividad normal en el cerebro, y se pasó el experimento a una nueva fase. En ella se pidió a los voluntarios que navegasen a través de un simulador que emulaba la vista de una persona que pasearía por la calle. En algunos puntos de la simulación, aparecía un teletransportador, que te permitía desplazarte de un lugar a otro conocido del mapa.

Durante el teletransporte, la pantalla del ordenador se volvía negra durante un periodo aleatorio de tiempo. Lo curioso fue, que no se registró una parada en las oscilaciones cerebrales durante el teletransporte, pero sí se detectaron cambios en el ritmo con la distancia recorrida por el teletransporte.

El veredicto de los autores, resume la idea que este estudio demuestra que estas oscilaciones son dirigidas totalmente por nuestra memoria y el proceso de aprendizaje en el cerebro, y no dependen de señales externas. Además, concluye que nuestro cerebro procesa información sobre la velocidad y la distancia recorrida durante el teletransporte, aunque sea virtual.

Fuente | Universidad de California