Tecnología

Tus ojos, una ventana hacia las enfermedades cerebrales

8 septiembre, 2014 16:53

Noticias relacionadas

Algunos dicen que los ojos son el espejo del alma, otros que el amor se encuentra en la mirada. Cada uno puede verlo de una manera, pero de lo que no cabe duda es que el ojo es el órgano más bonito y complejo que tenemos (con permiso del cerebro).

El ojo no apareció de la nada de un día para otro, sino que a lo largo de millones de años ha ido modificándose en función de nuestras necesidades. En aquella época lejana la visión era vital para detectar el peligro a tiempo, y los que eran más agudos con este sentido tenían mayor probabilidad de dejar descendencia.

Ahora bien, aparte de ser un órgano precioso con una larga historia y con todos los significados poéticos que desde siempre le hemos asociado, tal vez deberíamos de añadir una nueva frase al repertorio: tus ojos también son el espejo del cerebro.

Los cambios en la retina pueden detectar a tiempo enfermedades cerebrales

Un equipo de investigadores estadounidenses ha realizado un experimento en el que han puesto a prueba la relación que hay entre el ojo y el cerebro.

Como ya sabéis, el ojo tiene una serie de células especializadas que son capaces de comunicar el ojo con el cerebro, que son ni más ni menos que las neuronas que se encuentran en la retina.

Estas células son capaces de detectar el estímulo luminoso y transportarlo al cerebro para que interprete la información que le llega. Me es imposible, al menos para mí, entender cómo consigue el cerebro procesar tanta información y en tan poco tiempo.

Pues bien, estos científicos han descubierto que la primera señal de la demencia (en concreto, de un tipo de demencia denominada frontotemporal) se localiza en la retina.

Con las pruebas de imagen oportunas, han hallado que antes de que aparezcan los primeros síntomas de la enfermedad, se puede apreciar un adelgazamiento de la retina por la muerte de neuronas que ocurre a este nivel.

El principal autor del estudio, el doctor Li Gan, comentó lo siguiente:

“La retina se puede utilizar como un modelo para estudiar el desarrollo de la demencia frontotemporal en las neuronas. Si seguimos a estos pacientes en el tiempo, podemos ser capaces de relacionar una disminución en el espesor de la retina con la progresión de la enfermedad. Además, es posible que podamos hacer un seguimiento de la eficacia de un tratamiento a través de un examen ocular simple”

Estos son algunas de las aplicaciones que podría tener este gran descubrimiento. Por ahora, a la espera de que se realicen más estudios al respecto, nos quedamos con la parte más poética: nuestros ojos son el espejo del cerebro.

Fuente: Science Daily