Dicen que lo bueno siempre llega. Y en este caso concreto diré que es cierto. El pasado 13 de Septiembre, a primera hora de la mañana, varios blogs americanos de conocido prestigio filtraban imágenes y especificaciones de la cámara que Nikon llevaba pregonando tanto tiempo en críptico pero dulce susurro. Un modelo que pretendía desbancar por todos los medios a la Canon 5D Mark II como aspiración al modelo Full Frame digital con grabación de vídeo más económico del mercado, y asegurando facultades técnicas mejoradas. Dejando esta validación, como siempre, al propio consumidor, en primer lugar vamos a repasar qué prestaciones nos ofrece la nueva cámara D600 de Nikon:

• Sensor  Full  Frame de 24.3 MP.
• El cuerpo Full Frame más ligero y compacto de toda la gama Nikon. Peso de 760g sin tarjetas ni batería.
• Sensibilidad ISO 100-6400, forzada hasta 25.600.
• Sistema AF de 39 puntos. 7 de ellos operativos a diafragmas de 8f.
• Doble ranura de SD, compatible con las nuevas tarjetas UHS-I de alta velocidad.
• Procesador Expeed 3 (También empleado en la D4 y la D800).
• Ráfaga de disparo de 5.5 fps.
• Vídeo FULL HD a 30p/25p/24p en formato MOV comprimido en H.264.

Hasta aquí, todo correcto. Los rumores estaban en lo cierto y la presentación oficial muestra una cámara de notable calidad en todos sus apartados. Se dice que el procesador Expeed 3, combinado con este nuevo sensor, optimiza la reducción de ruido hasta niveles sorprendentes, como ya vimos con la Pentax K-5 (la cámara APS-C con mayor rango dinámico de todo el mercado, según los laboratorios de DxOMark) o la Nikon D7000, que dejó a todos los usuarios boquiabiertos por la capacidad de gestión señal/ruido en las sombras profundas incluso a sensibilidades muy elevadas.

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El sistema AF de 39 puntos no sólo suplanta el anacrónico sistema de la Canon 5D Mark II, heredado directamente de su predecesora, la 5D clásica, también le permite usar 7 puntos en diafragmas de hasta 8f, un dato que muchos fotógrafos de Deporte o Wildlife apreciarán a la hora de usar focales muy largas con multiplicadores y profundidades de campo razonables.

Además, lo que supone una robusta mejora, no es sólo un AF aceptable y preparado para trabajos variados de campo con diafragmas de hasta 8f, también lo es la velocidad de ráfagas de hasta 5.5 fps tanto en formato completo FX como en recorte DX, una cifra más que notable al tratarse de archivos individuales de 24.3 MP de resolución.

No se sacrifica velocidad de disparo, ni tampoco eficiencia en el enfoque automático, lo que da como resultado una cámara realmente funcional.

Paralelamente, Nikon verifica que la D600 puede captar imágenes en aproximadamente 0.13 segundos. Los mecanismos internos se han perfeccionado. El grip de la mano derecha, además, ha sido renovado y rediseñado para propiciar un botón de disparo fácil y no estresar el dedo con una botonera ineficiente.

Un sensor RGB de 2.016 píxeles incorporado en la máquina realiza en cada encuadre una serie de complejos cálculos y lecturas que apoyan y facilitan todo el trabajo del fotógrafo. Desde el seguimiento del sujeto a retratar, la identificación de la forma, la luz proyectada por el sujeto y la fuente de la misma, un análisis de altas luces y el clásico cálculo de temperatura de color para el balance de blancos automáticos, entre otras varias virtudes que varios fotógrafos testers han confirmado como sobresaliente.

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En cuanto al aspecto externo de la cámara, presenta un cuerpo de magnesio duradero con protección de golpes accidentales. El sellado exterior protege todas las piezas internas de inclemencias climáticas, como polvo y humedad, empleando exactamente los mismos materiales que usa la Nikon D800.

La grabación de vídeo FULL HD también se ha contemplado y revisado para optimizar todos los recursos del usuario. La duración máxima de los clips sigue fijándose en 29 minutos y 59 segundos en formato MOV comprimido a H.264, que viene siendo lo habitual en las DSLR con grabación integrada de vídeo. Posee una salida Minijack de 3.5mm para conectar micrófonos externos. Gracias a la opción D-Movie, podemos confirmar el foco en puntos críticos, con una magnificación de lupa de hasta 19x en el LCD.

Asimismo, podemos seleccionar el recorte DX, admitido también en el modo vídeo, de forma que podemos ganar una ampliación adicional multiplicando la distancia focal que tengamos por 1.5x, sacrificando la resolución efectiva hasta 10.4 MP, pero obteniendo un encuadre de mayor aproximación al sujeto. Esta combinación de modos FX y DX abre un mundo bastante rico en posibilidades a la hora de trabajar, ya que no sólo será divertido, sino realmente ventajoso, configurar ambos modos en función del repertorio de objetivos que empleemos y el tipo de fotografía en el que estemos trabajando. Finalmente, si bajamos la resolución hasta HD (1080x720p) los frame rates se amplían hasta 60p/50p/30/25p.

En último lugar, la señal de vídeo sin comprimir se puede sacar directamente por cable HDMI a un monitor externo o, si se desea, a un dispositivo de almacenamiento mediante el mismo cable, teniendo la señal de vídeo más pura posible para posteriores trabajos de edición.

El Firmware también incorpora un modo HDR donde en un solo disparo se realizan dos tomas que combinan automáticamente los frames para resultar en una sola toma completa. El cuerpo incorpora un flash integrado y también se puede conectar con un dispositivo WIFI WU-1b para controlar la cámara por control remoto. Por ejemplo, utilizando un móvil con sistema operativo Android, que, de momento, es el único OS compatible.

Definitivamente, mi conclusión es que por sólo 2.000 dólares esta cámara merece la pena en todos los aspectos, 2.700 con el objetivo 24-85mm 3.5f-4.5f ED AF-S VR, superando, de momento, todas las prestaciones técnicas de la Canon 5D Mark II —exceptuando la efectividad y el comportamiento del sensor, que aún no se han filtrado análisis de estudio y campo—. Por otra parte y para no desacreditar la todavía excelente cámara de Canon, añado que ha aguantado en el mercado todos estos años sin inmutarse lo más mínimo, siendo, igualmente, una virtuosa opción actual para realizar un salto al formato full frame digital.

Estamos a la espera para que se confirme el precio final y definitivo en Europa, ya que los mercados andan algo perturbados y la relación entre dólar y euro es, desafortunadamente para los europeos, cada vez más corta. Por si fuera poco, los precios que hemos leído son variopintos y no se ha recibido una confirmación rotunda y oficial. En cualquier caso, si este sensor está optimizado tan bien como en el caso de la D800 o la D7000, puede que estemos, sin albergar dudas, ante la Full Frame digital más económica de todo el mercado, encabezando la lista en relación calidad tecnológica-precio. Sólo me queda una pregunta:

¿A ti también te arde la cartera?

Toda la ficha técnica y las especificaciones restantes en la página oficial

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