Muchas veces nos encontramos ante una situación que bien podría tener cierta similitud con el fin del mundo o el Apocalipsis, y no es otra que se moje nuestro móvil y deje de funcionar de forma normal. O diréctamente que deje de funcionar. Cuándo sufrimos un percance de estas características lo más importante es reaccionar con rapidez y aplicar uno de tantos remedios caseros “de toda la vida” para ver si podemos salvar el terminal. Pero a estos remedios hoy se suma DRY-ALL.

Dry-All

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Dry-All es un Kit de emergencia para aquellas ocasiones de las que os he hablado. Su funcionamiento es muy simple. Cuando el móvil sufra el temido percance con cualquier tipo de líquido, tan solo tenemos que retirar la batería, secar con una toallita la humedad exterior del dispositivo e introducirlo en la bolsa del kit. Cerramos la bolsa con la cremallera, esperamos 48 horas y veremos después como nuestro móvil está nuevo.

El precio de Dry-All es de 29,99$ para teléfonos móviles normales, 59,99$ para smartphones y 49,99$ para tablets. Se puede conseguir desde su página web.

Cierto es que sale casi más caro el remedio que la enfermedad, pero con Dry-All nos aseguramos que nuestro móvil vuelva a funcionar. Pero si no nos queremos gastar dinero, vamos a hacer un repaso de las técnicas más punteras a día de hoy “OpenSource“.

Tarro con arroz

Verifico que esta técnica funciona porque mi antiguo móvil se recuperó de una tremenda tormenta, ya que salió a la calle sin paraguas y se caló. El procedimiento es el siguiente: Desmontamos el móvil todo lo que podamos, secamos un poco los componentes y los metemos dentro del tarro de arroz. Tapamos el recipiente y lo dejamos durante 2 horas.

Secar al sol

Igual que cuando en verano nos damos un chapuzón en la piscina, para secarnos nos tumbamos a que nos de el sol y ya de paso, nos ponemos morenos. Para el móvil es lo mismo, con la diferencia que solo se seca y no se pone moreno. Esta técnica ha pasado el estricto control de calidad de algún amigo.

Secar al horno

invasivo y peligroso ya que podemos acabar de escribir la sentencia de muerte del móvil. Se basa en meter el dispositivo en el horno y dejar este últmo durante dos minutos, a 100º.  Después apagamos y dejamos que siga con el calor residual. Tengo que decir que yo nunca lo he probado y nadie cercano a mi lo ha hecho, pero he oido hablar más de una vez de esta técnica. Por lo que desde Omicrono no nos responsabilizamos si el secado al horno no acaba de funcionar bien 😛

Seguro que vosotros conocéis algún método más de secado, así que animaos y compartirlo con el resto 😉

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