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Una impresora 3D gigante ha creado una lancha entera de golpe

13 octubre, 2019 18:30

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Cada vez es más evidente que la impresión 3D no "será una revolución": YA lo está siendo. Esta tecnología ha pasado de ser una simple curiosidad a una herramienta capaz de crear cualquier cosa que nos imaginemos; y que puede ser la clave para la exploración espacial en el futuro.

Proyectos como el último salido de la Universidad de Maine en Estados Unidos demuestran el enorme potencial de esta tecnología; allí han fabricado una gigantesca impresora 3D, una de las mayores del mundo, y la más grande que usa polímeros como material de impresión.

¿Y qué hacer cuando tienes una impresora 3D tan grande? Pues fabricas cosas grandes, que hasta ahora eran imposibles; tan grandes, que de paso rompen un par de récords mundiales cuando la usan.

La impresora 3D que fabrica lanchas

El mayor logro demostrado hasta ahora con esta impresora es la creación de una barca completamente impresa en 3D. Se trata del objeto sólido impreso en 3D más grande hasta ahora; es decir, que toda la barca se ha creado en una sola pieza y en un único proceso, en vez de montar piezas como es lo habitual.

Esto es posible porque la impresión 3D se realiza por capas, impresas una tras otra; el inconveniente es que es un proceso largo, que en este caso ha durado 72 horas para una barca de unos 7,62 metros de longitud.

Por lo tanto, este también es el barco impreso en 3D más grande fabricado hasta ahora, con la impresora 3D de polímero más grande del mundo. En Maine están tan orgullosos de esto que llamaron al libro Guinness de los récords para certificarlos.

Pero esto es algo más que un proyecto espectacular en términos de tamaño; también puede ser muy importante en términos prácticos. Porque el bote, llamado 3Dirigo, es completamente funcional; de hecho, en la presentación se comprobó su navegabilidad, alojando a seis personas sin mucha dificultad.

Este proyecto no solo busca nuevos métodos de producción, sino también investigar la viabilidad de nuevos materiales. Maine es un estado con grandes extensiones forestales, y proyectos como este buscan evitar la deforestación usando biomateriales.