Desarrollan un nuevo tipo de asfalto que evita por completo el hielo al incluir sal en el mismo compuesto.

Es un clásico: llega el invierno y en las zonas más frías aparece la nieve y el hielo en las carreteras, con el peligro que eso implica para los conductores, ya que se multiplican las papeletas para tener un accidente o, directamente, no poder circular.

La sal en las carreteras es otro de los clásicos para evitar ese hielo, ya que la disolución con agua hace que la temperatura de congelación sea menor. Pero claro, la sal no dura para siempre en las carreteras y hay que estar reponiendo.

Asfalto con sal para olvidarnos del hielo

¿Qué ocurre si se mezcla la sal con el propio asfalto? Eso es lo que ha pensado un equipo de investigadores liderado por el Dr. Seda Kizilel en la Universidad de Turquía.

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Han mezclado sal de potasio con un polímero hidrofóbico (que repele el agua), añadiendo esa mezcla al betún, uno de los componentes del asfalto. El resultado es un compuesto que, gracias a su contenido en sal, retrasa la formación del hielo.

Las pruebas en laboratorio mostraron que el compuesto seguía “liberando” sal tras dos meses, pero indican que aplicado al asfalto real de las carreteras, el efecto duraría mucho más. En condiciones reales, el desgaste producido por los coches en la superficie del asfalto con sal permitiría liberarla de capas inferiores, alargando su función durante años.

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