Tras presentarlo en el pasado CES de Las Vegas, Sony ha querido volver a exponer al público su Sony Xperia Z, un smartphone de gama alta con el que pretenden afrontar la primera mitad del año y plantar cara a las soluciones que la competencia está preparando (o ya ha presentado, como es el caso de HTC).

Recordemos que este Xperia Z incorpora un procesador Qualcomm Snapdragon S4 Pro a 1.5GHz junto con 2 GB de memoria RAM, lo que hace que el smartphone lo mueva todo con una gran soltura y con una velocidad extraordinaria, tal y como describimos en su día en el análisis escrito que realizamos.

La pantalla, por su parte, aumenta hasta las cinco pulgadas de tamaño y hasta los 1080 de resolución, logrando así una de las densidades de pixels más altas del mercado: 441 ppp. La tecnología de la pantalla es Mobile Bravia Engine, tal y como Sony nos ha acostumbrado en los últimos años con todos y cada uno de sus smartphones estrella.

El diseño, como dijimos en su momento, se compone de un cuerpo de cristal y fibra de vidrio de solo 7.6 milímetros de grosor. Además, este cuerpo es sumergible en el agua y resistente al polvo, dos características nada habituales en un smartphone de gama alta pero que, personalmente, creo que deberían de estar presentes.

Pero el factor que más destaca del Xperia Z es su cámara. Se trata de un sensor de trece megapixels con flash LED y grabación en 1080p a 30 FPS (con grabación en modo HDR) y, teniendo en cuenta que es un smartphone de Sony, queda patente que estamos ante una de las mejores cámaras del mercado, no hay ninguna duda.

Como características menores, encontramos tecnología NFC, Bluetooth 4.0, una batería de 2330 mAh y soporte para el protocolo DLNA, así como A-GPS y Glonass.

El smartphone estará disponible a partir del día 25 de febrero (hoy mismo) en algunas tiendas de Sony, mientras que al resto de tiendas se espera que llegue a primeros de Marzo a un precio de unos 600 euros.