Fragata Amiral Ronarc'h de Francia

Fragata Amiral Ronarc'h de Francia Naval Group

Observatorio de la Defensa

Francia ya cuenta con su buque más moderno: así son las FDI de Naval Group que compiten con las fragatas F-110 de Navantia

El astillero francés ha entregado a la Marina Nacional la primera de las cinco embarcaciones que sustituirán a la actual flota de fragatas FREMM.

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Las claves

La Marina Nacional de Francia recibe la fragata Amiral Ronarc’h, la primera de las cinco fragatas FDI de Naval Group, mejorando sus capacidades operativas.

Las FDI son buques multipropósito con capacidades antiaéreas, antisubmarinas, antisuperficie y para operaciones asimétricas, diseñadas para adaptarse a diversas misiones.

Naval Group ha optimizado el proceso de construcción de las FDI, permitiendo la producción de hasta dos fragatas al año en su astillero de Lorient.

Las fragatas FDI, equipadas con armamento avanzado y tecnología de última generación, compiten internacionalmente con las fragatas F-110 de Navantia.

La Marina Nacional de Francia está de estreno. Naval Group ha entregado a la fuerza naval gala el buque Amiral Ronarc’h, la primera de las cinco fragatas de defensa e intervención (FDI) encargadas por la Dirección General de Adquisiciones de Defensa (DGA). La nueva embarcación representa un salto cualitativo en las capacidades operativas francesas y simboliza una nueva etapa de renovación tecnológica, eficiencia industrial y cooperación estratégica en el ámbito naval europeo.

"Esta nueva generación de fragatas entrará pronto en servicio operativo y contribuirá decisivamente al fortalecimiento de las capacidades de la Marina Nacional gracias a sus excepcionales prestaciones ya demostradas en pruebas de mar", ha destacado el presidente y director ejecutivo de Naval Group, Pierre Éric Pommellet, durante la ceremonia de entrega del navío.

Las FDI, concebidas como sucesoras de las fragatas FREMM, son buques multipropósito capaces de operar con eficacia en todos los dominios del combate marítimo: antiaéreo, antisubmarino, antisuperficie y asimétrico. Su diseño modular y su arquitectura digital garantizan la adaptabilidad a cualquier tipo de misión, ya sea en solitario o integrada en una fuerza multinacional, según asegura su fabricante.

Este grado de versatilidad convierte a las FDI en una herramienta eficaz para la gestión de amenazas modernas, incluyendo submarinos de última generación, misiles supersónicos, ciberataques y operaciones asimétricas en entornos de alta complejidad.

De esta manera, la Amiral Ronarc’h encarna esta nueva filosofía de diseño naval promovida por el astillero semipúblico francés. Su estructura combina tecnologías avanzadas de procesamiento de datos con una integración total de sistemas automatizados, lo que permite operar el buque con una tripulación reducida sin comprometer su eficiencia ni su nivel de respuesta.

Esto no solo incrementa la operatividad sino que también optimiza los costos de mantenimiento y mejora la disponibilidad de la unidad en el tiempo. Según Naval Group, su sostenimiento alcanza estándares similares a los de las fragatas FREMM, con una tasa histórica de disponibilidad del 80% durante la última década.

En las pruebas de mar realizadas a lo largo de las últimas 14 semanas en el océano Atlántico, la Amiral Ronarc’h ha demostrado su robustez y estabilidad en condiciones exigentes, enfrentándose con éxito a un estado de mar 6, con olas de hasta seis metros de altura, según la escala de Douglas.

Construcción de una fragata FDI en las instalaciones de Naval Group en Lorient

Construcción de una fragata FDI en las instalaciones de Naval Group en Lorient Gastón Trelles

La capacidad de las FDI para navegar tanto en aguas frías como cálidas, así como en zonas de archipiélagos o mares agitados, refuerza su carácter global y su idoneidad para operaciones internacionales. Estos resultados, señalan desde la compañía naval, confirman la fiabilidad y el rendimiento de unas fragatas concebidas para operar en todos los mares del mundo, manteniendo su eficacia incluso en entornos adversos.

Dentro del marco industrial, Naval Group ha logrado un avance considerable con el desarrollo de un proceso de construcción altamente optimizado que permite la producción de hasta dos fragatas FDI por año. Esta capacidad refleja una evolución significativa en los métodos de ensamblaje y en la eficiencia logística del astillero de Lorient (Bretaña).

Competencia de las F-110

En las instalaciones bretonas no solo se lleva a cabo la construcción de las unidades encargadas por el Gobierno francés. En 2022, Naval Group cerró con Grecia la primera venta internacional de las FDI. Atenas adquirió tres de estas fragatas tras analizar distintas opciones en el mercado internacional, entre las que se encontraban ofertas provenientes de Estados Unidos, Alemania, Reino Unido, Países Bajos e Italia.

El Gobierno helénico, muy al inicio del proceso, dejó fuera de la competencia a las F-110 de Navantia, pese a que la propuesta presentada por el astillero español incluía una ambiciosa colaboración industrial que, más allá de la venta de cuatro embarcaciones, abarcaba también la modernización de los navíos de la clase Hydra de la Marina Helénica. En aquel entonces, la prensa local achacó la decisión del ejecutivo griego a los fuertes lazos en materia militar que España mantiene con Turquía y que, en los últimos años, se han estrechado incluso más.

Botadura de la fragata F-110 Bonifaz de la Armada

Botadura de la fragata F-110 Bonifaz de la Armada Gastón Trelles

La primera FDI para Grecia, la HS Kimon, ya se encuentra en fase de pruebas y Naval Group prevé su entrega antes de que finalice el año, mientras que a lo largo de 2026 hará lo propio con las dos embarcaciones restantes. De igual manera, semanas atrás, el ministro de Defensa griego, Niko Dendias, anunció el encargo de un cuarto buque.

Así las cosas, los buques de Naval Group se presentan como uno de los principales rivales a nivel internacional de las F-110 diseñadas por Navantia en el competitivo mercado naval. El astillero español botó la primera fragata de la serie, la F-111 Bonifaz, el pasado septiembre y ya se encuentra en negociaciones con distintos países con miras al primer contrato de exportación de su embarcación.

Características de las FDI

El desarrollo y la producción de una fragata FDI suponen alrededor de un millón de horas de trabajo en el astillero y otro millón en diseño y desarrollo. En este proceso participan más de 1.200 empleados de Naval Group junto con unos 400 subcontratistas, configurando una verdadera cadena de valor industrial que combina innovación tecnológica, ingeniería avanzada y un firme compromiso con los estándares de la OTAN, lo que garantiza plena interoperabilidad con las fuerzas aliadas.

En el plano técnico, todas las fragatas FDI cuentan con un desplazamiento de 4.500 toneladas, una eslora de 122 metros y una manga de 18 metros. Puede alcanzar una velocidad máxima de 27 nudos y dispone de una autonomía de 45 días, lo que le permite afrontar misiones prolongadas sin necesidad de apoyo inmediato.

Su capacidad de alojamiento permite operar con 125 tripulantes y transportar además a 28 pasajeros, cifra que ilustra su flexibilidad en misiones diversas, desde operaciones de combate hasta acciones humanitarias o de cooperación internacional.

En cuanto a su armamento, cada fragata estará equipada con misiles antisuperficie Exocet MM40 B3C y antiaéreos Aster. Asimismo, contará con torpedos antisubmarinos MU90 y un radar Seafire desarrollado por la empresa Thales. A su vez, pueden alojar un helicóptero de hasta diez toneladas, como los NH90 de Airbus, y un vehículo aéreo no tripulado de hasta 700 kilogramos.