
Fotograma de la película. Archivo
Se vende un icono del cine: la casa de Audrey Hepburn en ‘Desayuno con diamantes’ busca nuevo dueño
La propiedad, ubicada en pleno Manhattan, puede adquirirse por 15 millones de dólares con posibilidad de entrar a vivir en ella de forma inmediata.
Más información: El lujo de colarse en la intimidad de Chirino: el centenario del gran escultor llega a Gran Canaria
El lujo de despertar con vistas a una de las postales más icónicas de la historia del séptimo arte es algo de lo que podrá disfrutar quien se haga con la casa que se erige sobre el número 169 de la East 71st Street de Nueva York. No es una residencia cualquiera, sino uno de los monumentos más reconocibles en el corazón de Manhattan.
Una casa de piedra rojiza que, tras su fachada, esconde reminiscencias a escenas tan icónicas como aquella en la que Holly Golightly, personaje de Audrey Hepburn en Desayuno con diamantes (Blake Edwards, 1961) recibe a Paul Varjak engalanada con bata y antifaz, o cuando canta Moon River en la escalera de incendios.
Seis décadas tras su estreno, la adaptación cinematográfica de Truman Capote sale de la ficción para entrar en el mercado inmobiliario: este emblemático edificio se vende por 15 millones de dólares. "Dicen que la historia no se compra. Aquí sí se puede. Venga por la leyenda. Quédese por la vida", reza su anuncio.

Esta residencia adosada, en la que pueden vivir cómodamente dos familias, fue construida en el año 1910. Situada en una de las calles más selectas del Upper East Side, tiene cinco pisos y 414,7 metros cuadrados de interiores meticulosamente diseñados.

Fachada de la casa y salón de la segunda planta. Corcoran
Destacan espacios como su salón, con sus chimeneas de época, suelo de roble blanco e iluminación de diseño de Porta Romana. A él se suma una cocina de chef con isla central y mármoles importados desde Italia, además de cuatro dormitorios decorados al detalle en los que sus futuros dueños se sentirán como en una película.

Cocina y habitación principal en el cuarto piso. Corcoran
Además, cuenta con una terraza privada de 9 metros de largo, un verdadero oasis urbano con celosías personalizadas y cuidadas zonas ajardinadas que aportan un remanso de tranquilidad en plena ciudad.
Aunque Breakfast at Tiffany's se rodó en diferentes localizaciones, esta vivienda, a seis manzanas de Central Park, debe su fama a la historia ficticia de Holly, su inquilina, una joven de 19 años de la alta sociedad neoyorquina que encandiló a espectadores de todo el mundo por su glamurosa y controvertida vida.
Más allá del aspecto nostálgico, la vivienda conserva elementos que recuerdan aquella época dorada de Hollywood y la Nueva York de los años 50 y 60, gracias a una cuidadosa restauración de tres años en la que "no se han escatimado gastos" para respetar los detalles originales sin renunciar a las comodidades actuales.
Una tendencia de película
Este tipo de inmuebles, con su combinación de valor histórico y modernidad, son cada vez más valorados, lo que convierte su venta en una oportunidad para coleccionistas y amantes del patrimonio urbano.
No es la primera vez que una vivienda con relevancia cinematográfica despierta interés: en Londres, la residencia que sirvió de escenario para Love Actually (Richard Curtis, 2003) se puso a la venta en 2023 por unos tres millones de euros.
Más recientemente, el ático en el que se rodaron la segunda entrega de la saga Spider-Man y la tercera parte de El Padrino se convirtió en objeto de deseo para muchos fans en busca de nuevo hogar.