Moncho moreno, peluquero de las famosas, advierte: "La única forma de proteger el pelo del cloro y la sal es mojarlo antes"

Si hay algo que todas tememos al volver de las vacaciones, es ese pelo seco, sin brillo y con las puntas abiertas que nos dejan el cloro de la piscina y la sal del mar. Pero este verano, eso puede cambiar.

Moncho Moreno, uno de los peluqueros y estilistas más reconocidos de nuestro país, de reconocimiento mundial, ha compartido un consejo tan simple como efectivo para proteger tu melena del daño estival: mojarte el cabello con agua limpia antes de meterte al agua.

Un gesto rápido, fácil y gratuito que puede marcar la diferencia entre volver de la playa con un pelo brillante o con uno que pide tijera a gritos. "Si te tiras al agua directamente, tu cabello va a absorber toda la suciedad, además del cloro y la sal. Pero si ya te lo has mojado antes con agua limpia, ¡no entra nada!”, explica el experto. 

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El cabello funciona como una esponja. Cuando está seco, absorbe todo lo que encuentra a su paso. Si lo empapas con agua limpia antes de sumergirte en la piscina o el mar, limitas su capacidad de absorber sustancias dañinas, como el cloro, la sal o incluso los residuos de protector solar que flotan en el agua.

Este sencillo gesto crea una especie de barrera natural que protege la fibra capilar desde el primer minuto. Y lo mejor es que no necesitas productos caros ni tratamientos profesionales: solo agua.

Cómo cuidar el pelo durante el verano

Pero si quieres un plus de protección, los expertos también coinciden en que aplicar unas gotas de aceite capilar antes del baño puede marcar la diferencia. Este truco crea una película protectora sobre la cutícula del cabello que actúa como escudo frente a los químicos agresivos.

Puedes usar aceite de argán, coco, jojoba o uno específico para el cabello con filtro UV. Solo necesitas unas gotas, de medios a puntas, para evitar que el cabello se reseque, se decolore o pierda brillo tras el contacto con el agua.

El verano es, sin duda, la época más agresiva para el cabello. Y aunque el sol nos da ese tono dorado que nos encanta, también puede arruinar la salud de nuestra melena si no la cuidamos correctamente. Estos son los consejos clave que recomiendan los expertos y que deberías seguir al pie de la letra:

• Cepilla antes de la ducha
  El cabello mojado es más frágil. Por eso, desenredarlo antes de lavarlo reduce el riesgo de rotura. Hazlo con un cepillo de púas anchas o un peine de dientes largos, y si lo necesitas, aplica un poco de sérum para facilitar el deslizamiento.
• Usa agua templada
  Tanto para ducharte como para mojar el cabello antes del baño en el mar o la piscina, el agua templada es la mejor opción. El agua muy caliente puede abrir en exceso la cutícula y resecar aún más el cabello.
• Aplica champú solo en el cuero cabelludo
  El champú está diseñado para limpiar el cuero cabelludo, no las puntas. Al aplicarlo solo en la raíz, evitas arrastrar los aceites naturales de las zonas más frágiles y secas del pelo.
• No frotes el cabello al secarlo
  Evita enrollarlo en una toalla o frotarlo con fuerza. En su lugar, presiona suavemente con una toalla de microfibra o una camiseta de algodón. Esto minimiza el encrespamiento y la rotura.
• Usa acondicionador o mascarilla tras cada lavado
  El sol, el viento y el agua salada deshidratan el cabello. Por eso, después de cada lavado es imprescindible hidratar con un buen acondicionador o mascarilla nutritiva, especialmente si tienes el pelo teñido o con mechas.
• Evita el secador (si puedes)
  El verano es el momento perfecto para dejar secar tu melena al aire libre. Pero si necesitas usar herramientas de calor, no olvides aplicar un protector térmico antes. Y nunca uses la plancha con el cabello húmedo.

La dieta también influye en el pelo

El pelo no es independiente del cuerpo. Si tu alimentación es deficiente, tu melena lo notará. Por eso, en verano también conviene cuidar lo que comes. Una dieta rica en proteínas, frutas, verduras y ácidos grasos omega-3 es clave para que tu cabello se mantenga fuerte y brillante.

Vitaminas como la B7 (biotina), el hierro, el zinc y la vitamina D también influyen directamente en la salud capilar. Si notas que tu pelo se cae más de lo normal o pierde densidad, puede ser el momento de consultar con un dermatólogo o un tricólogo especializado.

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Y, por supuesto, un último consejo: protege el cuero cabelludo del sol. Este es una de las zonas más olvidadas, pero también una de las más sensibles a las quemaduras solares. Si llevas raya al medio, tienes poco pelo o padeces alopecia, usa gorra, sombrero o productos con protección solar específica para esta zona.

Quemarte el cuero cabelludo puede derivar en descamación, irritación e incluso en lesiones precancerosas si la exposición es prolongada.