Una modelo yemení en prisión: está acusada de “actos indecentes” por posar sin velo

La historia de la actriz y modelo yemení de 20 años Intisar al-Hammadi es un ejemplo de la discriminación que sufren las mujeres en Yemen por desafiar las normas sociales de la sociedad patriarcal.

Su caso ha llamado la atención del mundo por la injusticia y el machismo que lo atraviesa. La joven lleva más de cuatro meses en prisión tras ser acusada de actos de “indecencia”, “prostitución” y “posesión de drogas”, según el letrado de Human Rights Watch (HRW), que denunció la situación el pasado 30 de junio. Su gran actividad en redes sociales y sus fotografías sin pañuelo en la cabeza parecen ser las auténticas razones de esta detención. 

La joven fue torturada y obligada a firmar sin poder ver una confesión. Todo por desafiar las estrictas normas sociales de Yemen. La organización de derechos humanos Amnistía Internacional realiza una campaña mundial para recolectar firmas con el fin de que se la ponga en libertad.

El caso

Según relata Amnistía Internacional, el 20 de febrero Intisar al-Hammadi fue parada en un control policial en Chamlan, Saná, y detenida porque, supuestamente, una de las personas que viajaba con ella en el coche llevaba cannabis. La llevaron a la Dirección de Investigación Criminal de Saná, donde permaneció 10 días. Estuvo incomunicada y la interrogaron varias veces con los ojos vendados. La despertaban en medio de la noche y la llevaron a varias casas, preguntándole si solía trabajar allí como “prostituta”. También fue obligada a firmar una declaración preescrita que no pudo leer, “confesando” estar involucrada en delitos relacionados con las drogas.

Pasados 10 días, la trasladaron a la prisión central de Saná. No le dejaron hablar con su familia ni con un abogado. En esta prisión ha sufrido abusos verbales y comentarios sexistas y racistas (su madre es etíope) por parte de los guardias de la prisión, que también la llamaron “criada” y “puta”. El 21 de abril la fiscalía la interrogó y acusó de “consumo y promoción de drogas y prostitución”, cargos que ella niega rotundamente. Al final del interrogatorio, el director de la prisión la abofeteó.

"El juicio injusto de las autoridades hutíes contra Intisar Al Hammadi, además del arresto arbitrario y el abuso contra ella durante su detención, es un recordatorio del abuso al que se enfrentan las mujeres a manos de las autoridades en todo Yemen", afirmaba el subdirector para Oriente Medio de HRW, Michael Page.

Prueba de virginidad

Después de que la fiscalía impidiese al abogado de la joven acceder a su expediente, informaban a la actriz de que iban a someterla a una “prueba de virginidad”.

Según explican desde la plataforma de Amnistía Internacional, "este tipo de pruebas son una forma de violencia sexual y equivalen a tortura, según el derecho internacional". 

Amnistía Internacional lanzaba un mensaje de alerta para incentivar las firmas en su recogida: "La situación de Intisar empeora. Está en la cárcel. Le han comunicado que van a someterla a una “prueba de virginidad”. Su caso es ejemplo de la discriminación que sufren las mujeres en Yemen por desafiar las normas sociales. ¡ACTÚA! y pide su libertad", escribían en su cuenta de Twitter. 

Seguir sus sueños

Pese a las duras condiciones y las limitaciones de la libertad de la mujer en Yemen, Intisar al-Hammadi quiso perseguir su sueño de convertirse en modelo. 

Fue precisamente ese éxito el que le llevó a posar sin velo durante una de las sesiones de fotos. Cuando se dirigía a otro shooting en Saná, las autoridades hutíes pararon su coche para llevarla a comisaria. Tras la guerra civil, el país quedó en manos de los rebeldes Huthi, que establecieron medidas excesivamente estrictas para las mujeres. Un obstáculo para muchas jóvenes como Intisar al-Hammadi que solo quieren vivir su vida y su profesión siendo libres.