La movilidad personal atraviesa un momento de cambio, de constante vaivén. A los combustibles tradicionales, en plena "crisis de identidad", se les unen combustibles alternativos como el GLP -gas licuado de petróleo- o el GNC -gas natural comprimido-, amén de las ya conocidas modalidades híbridas y eléctricas. 

Audi lleva tiempo apostando por la movilidad utilizando el gas natural como combustible principal. Todos aquellos modelos de Audi alimentados por este combustible utilizan la denominación comercial "g-tron", siendo, estéticamente, prácticamente idénticos a las variantes más tradicionales. 

Ahora la firma premium de los cuatro aros anuncia la llegada a nuestro mercado de dos nuevas versiones propulsadas por gas natural. Se trata de los A4 Avant y A5 Sportback g-tron, que llegan para complementar una oferta de vehículos alimentados por gas en la que también encontramos al A3 Sportback. 

Mecánicamente tan sólo hay disponible un propulsor. Se trata del ya más que conocido 2.0 TFSI de cuatro cilindros, que en esta versión ha visto modificados algunos de sus componentes internos para funcionar correctamente con el nuevo combustible. El resultado son 170 CV, asociado tanto a una caja manual de 6 velocidades como a una automática S-Tronic. 

Con un depósito de 19 kg de gas y otro adicional de gasolina de 25 litros, estos g-tron son capaces de recorrer hasta 950 kilómetros sin parar a repostar. Cuando funcionan con gas, el coste de utilización desciende de forma drástica por debajo incluso de los 4€ cada 100 kilómetros al precio actual de este combustible que, no obstante, aún no está tan extendido en la red de estaciones de servicio de nuestro país. 

Gracias a su condición híbrida y a la mayor limpieza del gas natural como combustible, estos Audi obtienen la calificación ECO por parte de la administración, con las ventajas que ello significa. Con un precio de 43.010€ para el A4 Avant y de 46.000€ para el A5 Sportback, la diferencia respecto a las versiones diésel equivalentes es de solo 100€.