⁠Ni llenar el depósito ni revisar las ruedas: el sencillo truco para preparar tu coche antes de un viaje en España

Muchos conductores piensan que con llenar el depósito y echar un vistazo rápido a la presión de las ruedas basta para emprender un viaje sin preocupaciones. Sin embargo, esas acciones son solo la punta del iceberg.

El verdadero truco para evitar sorpresas durante el recorrido es realizar una revisión completa: frenos, líquidos, luces y estado general del vehículo deben estar en perfecto estado. Solo así se garantiza seguridad, comodidad y eficiencia.

La Dirección General de Tráfico (DGT) insiste en que un viaje seguro depende de varios factores que van más allá de un nivel de combustible o rueda bien inflada. En concreto, destaca la importancia de comprobar frenos, dirección, suspensión, neumáticos y luces.

Imagen de la revisión de una rueda. Getty Imagenes

Adicionalmente, talleres especializados recomiendan revisar todos los líquidos —aceite, refrigerante, líquido de frenos y limpiaparabrisas— para evitar fallos clínicos a mitad de camino.

Antes de salir a carretera, lo más efectivo es acudir a un taller de confianza o seguir una checklist riguroso:

Felipe Sacristán, mecánico: "No siempre los talleres engañan, son cosas que pueden pasar"

Nivel de líquidos: el aceite, refrigerante, frenos y limpia. Un depósito bajo puede causar desde sobrecalentamiento hasta pérdida de capacidad de frenado.

Frenos y suspensión: revisar presión del líquido, estado de pastillas y discos, y buscar ruidos o vibraciones extrañas.

Neumáticos: observar el dibujo —más de 1,6 mm—, buscar cortes o deformaciones y ajustar la presión en frío según la recomendación del fabricante.

Luces y señalización: comprobar todas las luces (cruce, freno, intermitentes, antiniebla, matrícula) y asegurarse de que estén alineadas y sin filtraciones (panella.cat).

Batería y limpia: garantizar el estado de la batería y el sistema de limpiaparabrisas, incluso cambiar las escobillas si están desgastadas.

Pedro Bastida, experto en mecánica: "Os voy a enseñar un vehículo que debéis evitar comprar a toda costa"

Llevar a cabo esta revisión completa nos permite detectar y corregir pequeños fallos antes de que se conviertan en problemas graves. Aunque puede representar un coste de entre 50 y 100 €, es una inversión inteligente: evita averías en ruta, inmovilizaciones o incluso sanciones.

Además, se anticipan imprevistos —como una escobilla que no limpia bien en lluvia intensa— que pueden tener consecuencias serias. Un viaje largo exige más que mecánica: planificar bien la ruta, descansar, mantener una buena hidratación e incluso contar con un pequeño kit de emergencia —botiquín, triángulos, linterna y herramientas básicas— puede marcar la diferencia.