
Josep María Recasens, presidente de Anfac
El automóvil pide un plan de ayudas para el vehículo industrial e incentivos fiscales para renovar el parque
El sector lleva un año sin ayudas a la renovación de flotas por la falta de Presupuestos Generales del Estado
Más información: Recasens (Anfac): "Pedimos el Moves, emisiones flexibles y un plan largo porque cumplir en 2025 es misión imposible"
El sector del automóvil hace un llamamiento a las Administraciones públicas: necesitan ayudas para renovar la flota de vehículos industriales. Así lo ha manifestado Josep María Recasens, presidente de la patronal de fabricantes de automóviles y camiones (Anfac), en el II Foro del Vehículo Industrial y Autobús.
El directivo catalán ha reconocido que "lamentablemente nos olvidamos en demasía del transporte por carretera, que es clave para la economía en España". Así, Recasens ha apuntado que "las exigencias son igual de duras en el segmento de los vehículos industriales que en el de los turismos".
Y es que los objetivos de reducción de emisiones marcados por la Comisión Europea pasan por recortar un 45% las emisiones de CO2 para 2030 en los vehículos industriales, guarismo que se incrementa hasta el 90% de cara a 2040. En el caso de los autobuses urbanos, la descarbonización pasa por reducir las emisiones un 90% en 2030 y un 100% en 2035.
"Por su posición periférica, España tiene en el transporte por carretera a uno de sus motores económicos. Genera 600.000 puestos de trabajo directos, aporta el 4,8% del PIB, el 96% de todo el transporte de mercancías del país se hace por carretera y el 50% del transporte internacional de pasajeros es por carretera", ha incidido el también directivo del Grupo Renault.
Por todo ello, Recasens ha aseverado que "las Administraciones deben ser un socio para ayudar a renovar las flotas con seguridad y competitividad". Cabe recordar que el sector del transporte por carretera carece de planes de incentivo a la demanda desde el 30 de abril de 2024. Entonces, venció el denominado Moves Mitma, un plan de incentivos para la transformación de flotas de vehículos pesados de transporte profesional por carretera que contaba con una dotación económica de 400 millones de euros de los fondos europeos. Dicho programa no se prorrogó debido a la falta de Presupuestos Generales del Estado (PGE).
Asegurar la competitividad
En lo que ha hecho hincapié el presidente de la patronal de los fabricantes es en mantener la competitividad. "Un camión pierde dinero cuando está parado", ha comentado. "Necesitamos al Gobierno de España y a Europa para colaborar con la industria del automóvil y el transporte por carretera", ha añadido el directivo. "Dejar de lado el transporte por carretera supondría una pérdida de empleo y de soberanía", ha dicho Recasens. No obstante, ha recordado que "no se puede poner en jaque ni la competitividad ni la sostenibilidad económica del sector".
El sector del vehículo industrial avanza a un ritmo mucho más lento que el de los turismos, en lo que a descarbonización se refiere. La cuota de mercado del vehículo industrial eléctrico se sitúa en el 1,2%, mientras que la medida europea se sitúa en el 35%. De hecho, según ha reconocido el propio Recasens, "en España solo circulan 1.000 camiones electrificados sobre un parque de 600.000 vehículos".
Por todo ello, desde Anfac han demandado un plan de ayuda a la demanda, así como medidas de incentivo a las empresas para renovar el parque de vehículos industriales, como la deducción del Impuesto de Sociedades para la compra de vehículos electrificados y puntos de recarga.
Y es que según ha reconocido José López-Tafall, director general de Anfac, "la antigüedad del parque de vehículos industriales en España se sitúa en una edad media de 15,1 años, mientras que en Alemania es de 10,6 años de media y de 9,5 años en Francia". El directivo cántabro ha comentado que "una flota anticuada es una flota cara y tendrá problemas de competitividad".
Escasez de puntos de recarga
De otra parte, un punto importante para poder descarbonizar este sector son los puntos de recarga. Los vehículos industriales precisan de dos necesidades en comparación con los turismos: que los puntos de recarga tengan potencias superiores a los 250 kW y espacio para que quepan estos modelos.
Al cierre del primer trimestre del año, hay cerca de 1.600 puntos con más de 250 kW. No obstante, López-Tafall ha asegurado que la falta de información "hace que no seamos capaces de identificar cuántos de estos puntos son válidos para el transporte pesado".
De otra parte, desde la patronal también han hecho un llamamiento a la adecuación del marco jurídico español para permitir la circulación de vehículos pesados con un nivel de autonomía SAE 4.