
Una paciente en el servicio de Neumología del Hospital Quirónsalud Marbella.
Avance en el tratamiento del enfisema grave: las válvulas endobronquiales ganan terreno
El Hospital Quirónsalud Marbella impulsa una alternativa eficaz, segura y mínimamente invasiva frente a la EPOC, que causa más de 29.000 muertes al año en España.
Más información: José Ángel Pascual, urólogo, sobre la linfadenectomía pélvica en el cáncer de próstata: “Identifica metástasis temprano”
La Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC) continúa siendo una de las principales causas de muerte en España, con más de 29.000 decesos anuales, lo que equivale a tres fallecimientos cada hora, según datos de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica. Se trata de una dolencia progresiva que deteriora el tejido pulmonar y compromete seriamente la capacidad respiratoria.
Ante esta situación, las válvulas endobronquiales han emergido como una solución revolucionaria para quienes sufren enfisema avanzado. Este dispositivo, que se implanta a través de una broncoscopia y sin necesidad de cirugía abierta, permite reducir el volumen de aire atrapado en el pulmón, facilitando una mejor función respiratoria.
El doctor José María Ignacio, jefe del área de Neumología en el Hospital Quirónsalud Marbella, explica que “estas válvulas actúan cerrando selectivamente el bronquio afectado para liberar el aire acumulado, sin permitir que vuelva a entrar, lo que contribuye a descomprimir zonas sanas del órgano”. Este método, que requiere únicamente el uso de un fibrobroncoscopio, se posiciona como una de las opciones terapéuticas menos agresivas para el paciente.
Los resultados clínicos muestran mejoras sustanciales en capacidad de ejercicio, sintomatología y bienestar general en individuos con enfisema heterogéneo, pulmón hiperinsuflado y sin ventilación colateral. El centro hospitalario marbellí fue pionero en Andalucía al incorporar esta técnica hace siete años. La intervención, realizada en quirófano, dura entre media hora y una hora, y consiste en colocar entre tres y cinco válvulas para inutilizar funcionalmente un lóbulo pulmonar afectado.
En muchos casos, este enfoque ha permitido reducir la dependencia de terapias con oxígeno y complementar eficazmente otras estrategias como la fisioterapia respiratoria.