Imagen del nuevo gimnasio que ha abierto sus puertas en el Camino de San Rafael, en Málaga.
La fiebre por los gimnasios llega a Camino de San Rafael: esta es la última nave reconvertida en centro deportivo
Abre sus puertas un nuevo espacio deportivo en una antigua nave industrial.
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La fiebre por abrir nuevos gimnasios en Málaga capital se extiende hasta el Camino de San Rafael.
Este gran escenario empresarial, localizado en plena trama urbana, sigue a la espera de que se determine su futuro.
Años atrás, el propio Ayuntamiento amagó con sentar las bases de una extraordinaria operación de transformación, que incluía la eliminación de las naves industriales actuales y la configuración de un nuevo barrio con hasta 2.800 viviendas.
Mientras se activa o no el movimiento definitivo, en el que es indispensable el aval de los propietarios y empresarios, hay actuaciones de un calado menor que se ponen en marcha.
Ejemplo de ello es el proyecto impulsado en las últimas semanas por la empresa Nowfit La Nave, S.L., que ha recuperado una vieja nave en un centro deportivo.
El proyecto, que recibió licencia de obras por parte de la Gerencia de Urbanismo a principios del pasado mes de septiembre, incluyó la reforma interior de una nave hasta ahora destinada a almacén y oficinas.
El inmueble, construido en 1995, ocupa una parcela de 531 metros cuadrados y tras la reforma contará con una superficie útil de 444,39 metros.
El gimnasio, de carácter provisional, ofrece una sala diáfana de actividades y máquinas, tres vestuarios/aseos, recepción, pasillo de evacuación y zona de entrada.
El objetivo es dar uso a una instalación sin actividad mientras el ámbito espera el desarrollo urbanístico residencial previsto en el PGOU, algo común en zonas industriales de Málaga.
La autorización se concede en régimen precario: las instalaciones están sujetas a ser retiradas sin indemnización a requerimiento municipal cuando así lo demande el futuro planeamiento, y la eficacia de la licencia queda supeditada a la inscripción de estas condiciones en el registro de la propiedad.
El plazo estimado inicialmente para la ejecución de la obra era de tres meses, con un presupuesto de ejecución material de 12.449,59 euros y una garantía adicional de 1.675,15 euros para cubrir el desmontaje y la restitución a su estado original.
Este nuevo gimnasio provisional responde a la demanda de equipamientos deportivos del barrio y ejemplifica la transformación temporal de espacios industriales urbanos en espera de grandes desarrollos residenciales en Málaga.
Urbanismo certifica que el uso temporal no dificulta los planes previstos para el sector y se cumplen todas las condiciones técnicas y urbanísticas exigidas.