Podría ser el arranque de un chiste, pero no lo es. Checos, polacos, británicos, holandeses, estadounidenses, mexicanos, españoles y hasta un japonés. Todas estas banderas lucen ya en la lujosa torre de apartamentos levantada por Sierra Blanca Estates en el litoral oeste de Málaga. La edificación, que lleva la firma de Carlos Lamela, se ha convertido en nuevo icono arquitectónico de esta renaciente zona, así como en referente inmobiliario del hasta ahora inexistente residencial de alto standing en la capital de la Costa del Sol.

La variedad de nacionalidades confirma el éxito de la promoción y la pujanza de Málaga como nuevo destino residencial a nivel nacional e internacional. Es relevante el peso que los españoles y, de manera concreta, los malagueños tienen en el reparto de compras. Sobre este particular, el CEO de Sierra Blanca Estates, Carlos Rodríguez, apunta que alrededor del 50% de las enajenaciones tienen a españoles como clientes, siendo la mitad de ellos malagueños.

Aunque sin unos porcentajes claros, la tendencia es semejante en los otros dos bloques del sector, impulsados por Metrovacesa. Desde la compañía ponían en valor meses atrás el peso del cliente local en la comercialización, así como de malagueños de origen pero que vivían fuera de la ciudad.

Esto es especialmente significativo al tratarse de un producto que no está al alcance del bolsillo de la inmensa mayoría de vecinos de la localidad. De acuerdo con los datos aportados por Sierra Blanca, el precio medio de venta se ha situado en los 1,3 millones de euros, alcanzado algunas firmas destacadas durante su comercialización como una doble venta por valor total de 8 millones y otras por importes cercanos a los 3,3 millones de euros. El valor acumulado de venta supera los 100 millones de euros.

Cifras que siendo relevantes están en las antípodas de lo que se llegará a pagar por los dos áticos que coronan la torre. Ambos están ya en el mercado por 9,75 millones. Aunque hay viviendas más caras en la provincia, no hay nada que se le pueda comparar en la capital de la Costa del Sol. 

Interior de uno de los áticos de Sierra Blanca Tower.

La demostración de todos los detalles que rodean a las joyas de la corona del proyecto pone el punto y casi final a una operación que tuvo su inicio en 2019, cuando fue presentada la propuesta diseñada por el Estudio Lamela Arquitectos. El lapso de tiempo es de tres años desde el momento en que el Ayuntamiento otorgó la necesaria licencia

El complejo, con una altura de 71 metros y 21 plantas, que comparte sector con otras dos edificaciones promovidas por Metrovacesa, da cabida a 69 apartamentos y dos áticos-dúplex, con superficies que van de los 180 a los 500 metros cuadrados. Una de las particularidades de la iniciativa es el gusto por el interiorismo, que ha corrido a cargo de GC Studio.

La entrega de las primeras viviendas tuvo lugar a comienzos del 2024. Siendo llamativas las dimensiones de todas ellas, dos son las que ponen la guinda a tan significativo proyecto: sus áticos. Ambos cuentan con más de 500 metros, distribuidos en dos plantas, con piscina privada particular.

Aunque los 9,75 millones de partida parecen del todo estratosféricos, la realidad es que ya hay confirmadas varias ofertas de compra. "Estas dos viviendas representan mucho más que la culminación de nuestra torre, se han creado con el firme propósito de convertirse en las dos casas diseñadas con el mayor estándar de lujo y calidades de la ciudad de Málaga", remacar Rodríguez.

Mármol de Carrara, cocinas de Fendi Casa…

Cada uno de estos inmuebles, situados en los niveles vigésimo y vigésimo primero de la torre, cuentan con una distribución "gemela" de dos plantas conectadas entre sí gracias a una escalera volada en forma de U con peldaños suspendidos cuyo diseño, a medida, se ha ejecutado en mármol Pinta Verde, así como una barandilla de vidrio que busca integrar esta zona de la vivienda con el concepto de luminosidad y transparencia, dejando que el mar penetre hasta el interior, sin obstáculos constructivos. 

Otras vistas desde uno de los áticos.

Del mismo modo, cada vivienda cuenta con su propio ascensor panorámico para acceder de una a otra planta de la misma. Son los acabados, calidades, materiales y marcas implicadas en la ejecución de estas viviendas la señal de distinción de las mismas y la constatación de estar ante un producto verdaderamente diferencial en la ciudad. 

Destacan los suelos en combinación cromática de mármol de Carrara, Pinta Verde y Verde Alpi. Un material, en sus versiones Verde Alpi y Pinta Verde también presente en algunos revestimientos de la zona del salón-comedor de más de 80 metros, en combinación con la madera de Palisandro también utilizada en algunos techos y, en el caso de las terrazas, junto a la tarima de bambú de Listone Girodano.

La primera planta de estos áticos-dúplex ubica el acceso y las estancias principales de la vivienda, como los 3 dormitorios máster dotados de baño (en cuyo diseño han participado marcas como Mirage o Boffi, en los muebles del lavabo y grifería, respectivamente) y vestidor propio. 

Destaca, en el dormitorio principal de cada vivienda, el suelo de madera de roble Listone Giordano; los panelados de cuero natural; además de un gran baño (dotado de bañera, ducha y sauna para dos personas con vistas al mar y un lavabo fabricado a medida y encastrado en la construcción en mármol), así como un vestidor de amplias dimensiones diseñado por la firma Fendi Casa con armarios rematados en vidrio y revestidos de ante.

Fendi Casa está presente como marca referente en el diseño exclusivo de las dos cocinas (una por planta), incluyendo, en la cocina principal, una gran isla ejecutada en mármol de Carrara. 

Es en la segunda planta de estas viviendas, de unos 100 metros, donde se sitúa la terraza solárium dotada de una piscina privada de unos 25 metros, que cuenta con su propio sistema contra-corriente de nado permitiendo a sus usuarios entrenar, así como un acceso propio desde el interior a la azotea-solarium compartida de la torre.