Casco antiguo de Frigiliana.

Casco antiguo de Frigiliana.

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Parece la Toscana, pero está en Málaga: el pequeño pueblo con vistas al mar perfecto para visitar este verano

Su casco antiguo, conocido como el barrio morisco, está considerado uno de los más bonitos de España.

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Los paisajes de Andalucía son tan variados como sorprendentes. La comunidad está repleta de rincones ideales para una escapada en verano, donde se mezcla el turismo de sol y playa con la visita a espacios naturales y pequeños pueblos con mucha historia.

Uno de esos lugares especiales se encuentra en la provincia de Málaga, y ha sido apodado, con razón, la "Toscana española". Se trata de Frigiliana, un pintoresco municipio enclavado en la comarca de la Axarquía, muy cerca de Nerja.

No solo enamora por su estética, también ha sido reconocido en múltiples ocasiones por su esfuerzo en mantener viva la arquitectura tradicional andaluza. En los últimos años se ha convertido en un destino muy buscado tanto por viajeros nacionales como extranjeros.

Este pequeño pueblo cautiva a quienes lo visitan con sus calles empedradas, sus casas encaladas rebosantes de flores, y un paisaje montañoso que recuerda a los suaves valles italianos.

El pueblo está rodeado de montañas, pero al mismo tiempo ofrece panorámicas espectaculares del mar Mediterráneo. Su casco antiguo, conocido como el barrio morisco, está considerado uno de los más bellos de España. Sus callejuelas estrechas, fachadas blancas y macetas llenas de geranios y buganvillas crean una atmósfera de postal.

Frigiliana es también un reflejo de la mezcla de culturas que han marcado la historia de Andalucía. En cada rincón se percibe la huella morisca, cristiana y judía, especialmente en el barrio morisco-mudéjar, donde los detalles arquitectónicos de inspiración musulmana siguen muy presentes.

Uno de los episodios históricos más importantes del pueblo es la Batalla del Peñón de Frigiliana, que tuvo lugar en 1569. Este hecho se conmemora con una serie de azulejos de cerámica repartidos por las calles, que narran la historia de aquel conflicto y sus consecuencias, convirtiendo al pueblo en un auténtico museo al aire libre.

La multiculturalidad se celebra anualmente en el Festival de las Tres Culturas, donde música, gastronomía y artesanía rinden homenaje al intercambio cultural histórico.

Gastronomía

Tradiciones como la elaboración de la miel de caña y platos con influencias árabes, como el ajoblanco, muestran cómo Frigiliana ha preservado su legado y lo ha integrado en su vida cotidiana.

La gastronomía local también es un aspecto a destacar de Frigiliana. Los platos típicos de la zona incluyen el chivo lechal asado, el ajoblanco (una sopa fría a base de almendras), y el vino dulce de Frigiliana, que es un producto artesanal muy apreciado.

También es ideal para los amantes del senderismo, ya que está junto al Parque Natural de las Sierras de Almijara, Tejeda y Alhama, con rutas como la de El Acebuchal o el Río Higuerón.