De acuerdo con el último Informe de Inserción Laboral de la UMA, sus graduados de Ingenierías son los que, pasados unos años, consiguen mejores sueldos, logran más contratos indefinidos, tardan menos en encontrar trabajo y están más satisfechos con su empleo de toda la Universidad. Esos perfiles técnicos son una demanda más común entre las empresas del pujante ecosistema de innovación de la Costa del Sol, que calcula que necesita varios millares más de profesionales, y en algunos grados la demanda de los alumnos duplica la oferta.

Y, con todo, la oferta de plazas de nuevo ingreso para estas carreras en la Universidad de Málaga está estancada desde hace años.

La cifra para el próximo curso recientemente aprobada por el Consejo de Gobierno es de 1465 nuevas plazas en los grados de esta rama, menos de un 20% del total de los puestos abiertos, 7437. La trayectoria que dibujan estos datos en los últimos años, consultados por EL ESPAÑOL de Málaga, es de mar en calma chicha.

Se han producido algunas variaciones cuantitativas, pero mínimas y no siempre al alza. Desde el curso 2017/18, el máximo de plazas ofertadas en Ingenierías ha sido de 1485 (en ese mismo 2017/2018 y en el 2020/2021) y el mínimo, de 1400 (en este actual 2022/2023). Entre medias, se ha producido el gran boom del ecosistema tecnológico de Málaga... sin que haya supuesto grandes cambios en esos números de plazas.

Sí que ha habido cambios en el programa de estudios. Por ejemplo, el Consejo de Gobierno ha aprobado para el próximo curso el inicio de las actividades de un innovador grado en Ciberseguridad e Inteligencia Artificial —dos de las especialidades más pujantes tanto a nivel global como local—, con espacio para 65 estudiantes. Esos huecos se han creado por la desaparición de las 55 plazas del grado en Ingeniería de Computadoras, que también era uno de los grados menos demandados de su rama, por lo que el cambio es más cualitativo y de enfoque que cuantitativo.

[La cuenta atrás para hacer de Málaga capital de la ciberseguridad llega a su fin]

Por su parte, el grado en Ingeniería de Organización Industrial ofrece 65 plazas —las mismas que Eléctrica, Electrónica Industrial, Diseño Industrial e Ingeniería de la Salud—; Ingeniería Telemática, en Sistemas de Telecomunicación, en Sistemas Electrónicos y en Sonido e Imagen cuentan con espacio para 60 alumnos; Ingeniería en Tecnologías de Telecomunicación, 45; Electrónica, Robótica, y Mecatrónica, al igual que la del Software, 75.

Los grados de esta rama que más plazas ofertan son Ingeniería en Tecnologías Industriales (200), Ingeniería Informática (140) e Ingeniería Mecánica (100). Al otro lado del eje, las carreras con menos plazas son los dobles grados en Eléctrica y Mecánica (25), en Mecánica y Diseño Industrial (25), Electrónica Industrial y Eléctrica (15), Tecnologías de Telecomunicación y Matemáticas (15), Ingeniería Informática y Matemáticas (15).

[La UMA, ante el 'boom' de la demanda de talento tecnológico: "La calidad del ingeniero es innegociable"]

Esta última fue el pasado verano, además, la carrera de la UMA con la nota de corte más alta: un casi imposible 13,72 sobre 14, que muestra que el interés de los alumnos en esa doble titulación es más que palpable. Además, los registros de la Escuela Técnica Superior en Ingeniería Informática son de un 213% más de solicitudes de alumnos que plazas ofertadas en sus grados.

En el otro lado de la balanza se sitúan las Ingenierías en Sistemas Electrónicos, Eléctrica, Telemática y en Tecnologías Industriales, que el pasado curso quedaron con algunas plazas libres tras las primeras convocatorias, pero con oferta condicionada.