Los senderos por los que caminó Picasso están bendecidos por el peso de sus huellas. Las pisadas del gran artista malagueño han generado un interés desmedido hacia su figura. La gran deuda pendiente que la ciudad sigue teniendo por el autor de Las señoritas de Aviñón reside en la antigua Escuela de Bellas Artes de San Telmo, donde se encuentra el Ateneo desde el año 2000. Allí está el denominado aula Picasso, donde el pintor empezó a su desarrollo profesional. 

Sin embargo, para que este espacio 3.189 metros cuadrados vuelva a recuperar su esplendor, requiere de una importante actuación cuyo presupuesto de ejecución material de 322.251,87 euros. 

Este montante requería de una aportación considerable de partidas procedentes de las administraciones públicas. Es por ello por lo que el Ayuntamiento de la capital dio el visto bueno en diciembre de 2022 a una cuantía que superaba los 100.000 euros. Lo mismo ocurrió con la Diputación de Málaga en forma de "especias" con la redacción del proyecto técnico por parte de Borja Peñalosa, miembro del equipo de Fomento e Infraestructuras.

Sin embargo, falta un último paso dentro de la fase económica: los fondos de Cultura de la Junta. En declaraciones a EL ESPAÑOL de Málaga, el presidente ejecutivo del Ateneo, Miguel Tello, explica que esta partida ya está atribuida por parte de la Consejería responsable, aunque todavía no se ha ejecutado, según comunicaron los técnicos "poco antes de navidades".

¿Qué se conserva?

Esta intervención, que busca recuperar la imagen histórica del lugar, dotándola de las instalaciones e infraestructuras necesarias para su adecuación como sala expositiva abierta al público, cuenta con un detalle importante. Y es que entre los elementos que se conservan está parte del material empleado por Picasso durante su aprendizaje. 

La mayoría de estas piezas se encuentran guardadas dentro del propio Ateneo, aunque según confirma Tello, algunas de ellas se trasladaron a la Escuela de Arte y Oficios ya que las condiciones para su conservación son más favorables. 

Así, taburetes, caballetes, pizarras, escayolas y guardarropas que pasaron por las manos del genio malagueño volverán a ver la luz, una vez que se acometan las restauraciones necesarias debido al paso del tiempo. Superada esta fase, tocará trabajar en el contenido, configurando un relato cultural que permita cerrar el círculo de la ruta picassiana por Málaga. 

¿Qué hay del edificio?

Los informes emitidos sostienen que nos encontramos por tanto ante un espacio privilegiado y único por tratarse de uno de los lugares de la infancia de Pica­sso relacionados con la pintura y el mundo artístico, en este caso a través de la figura y actividad profesional de su padre.

El estado general de conservación de la sede del Ateneo de Málaga es aceptable, en­contrándose actualmente en uso, sin detectarse patologías mecánicas que pongan en duda la estabilidad de la estructura en general, y cuenta con todos los servicios de abastecimiento urbano. Sin embargo, en lo que se refiere al estado de conservación de la estancia a rehabilitar, se constatan ligeros signos de ataques de insectos xilófagos las estructuras de madera.

El expediente de licencia recogía que la ejecución de las obras implicaba formar rampas para salvar los escalones existentes entre el desembarco de la escalera y las dos entradas al aula, así como para salvar el desnivel entre galería y aula, sistema de ventilación y climatización, instalación eléctrica y el falso techo demolido se restituye empleando sistemas similares a los existentes mediante el uso de tablillas de madera clavadas a la estructura.

Este extremo ya ha contado con las autorizaciones pertinentes por parte de la delegación de Educación de la Junta de Andalucía, según ha confirmado a este periódico el responsable de este departamento, Miguel Briones. Pero no será el único espacio que se vea afectado por estas obras, ya que el inmueble acoge también la iglesia de Santo Cristo de la Salud, la Sociedad Económica de Amigos del País, el Colegio de Educación Infantil y Primaria Prácticas nº 1, así como de la sede del Ateneo. 

Los trabajos planteados obligan a realizar un refuerzo estructural, a rehabilitar las carpinterías existentes, a ejecutar un nuevo forjado de perfiles metálicos y paneles sándwich, a repasar la cobertura de tejas retirando las tejas deterioradas y retejando con tejas cerámicas curvas antiguas.

De hecho, desde el Ateneo subrayan que no se descarta que se tenga que suspender por un periodo de tiempo "no demasiado largo" la actividad del salón de actos que se encuentra justo debajo: "Es una obra que no es de especial dificultad; aunque afecta a vigas y forjados, se trata de una restauración".