El Consejo de Gobierno ha tomado conocimiento de las obras de aprovechamiento de los recursos hídricos y conducciones del Bajo Guadalhorce para el abastecimiento de Málaga capital.

Esta actuación, que cuenta con un presupuesto de 15,74 millones de euros y un plazo de ejecución de diez meses, rehabilitará completamente seis pozos para recuperar su plena operatividad sin modificar sus características geométricas ni superar los caudales de explotación autorizados.

Asimismo, en el caso de las conducciones, se rehabilitarán los tramos existentes, ejecutando aquellos otros que resulten necesarios en función de las necesidades. Los pozos objeto de esta actuación están situados en la zona conocida como Puente del Rey, que cuenta con tres sondeos; en Perales, dos pozos, y otro en el aeropuerto Sur.

Las obras de esta actuación se centrarán en su rehabilitación, incluidas sus conexiones eléctricas y equipamientos necesarios, y la conexión hasta la Estación de Tratamiento de Agua Potable (ETAP) de El Atabal, con la rehabilitación de algunas tuberías existentes y el tendido de otros tramos necesarios.

Las obras autorizadas incluyen también una actuación para la acometida en media tensión hasta la red más cercana y la ejecución de cuatro centros de transformación distribuidos en cada pozo. Desde estos transformadores, se distribuirá en baja tensión a cada una de las casetas de captación previstas en cada pozo.

La extracción del agua de los pozos se realizará mediante bombas sumergibles de 220 kW de potencia con punto de trabajo de 100 l/s y altura de 100 m.c.a., que elevarán el agua hasta el depósito existente en la zona de Puente del Rey.

Esta instalación, actualmente en desuso, será también rehabilitada tanto a nivel estructural como de impermeabilización, urbanización e instalaciones. Además, se acondicionará la sala de máquinas para albergar los equipos de elevación del agua hasta la ETAP de El Atabal.

Tras las precipitaciones de la última semana de marzo, los embalses del Sistema de Explotación Guadalhorce-Limonero (Guadalhorce, Guadalteba, Conde de Guadalhorce y Casasola) que son los que sirven de base para calcular el indicador de sequía, han conseguido almacenar 14,54 hectómetros cúbicos, lo que ha elevado su almacenamiento de agua hasta los 87,19 hectómetros cúbicos.

No obstante, a pesar de estas aportaciones, el Sistema de Explotación Guadalhorce-Limonero continúa en estado de excepcional sequía, y lejos de alcanzar el umbral de salida de esta situación, tal y como refrendan las simulaciones realizadas hasta final del año hidrológico con distintos modelos, que sitúan esta fecha por debajo del límite establecido de escasez grave, fijado en 71 hectómetros cúbicos.