¿Lo has notado? La tierra ha servido de despertador para algunos malagueños este martes. El Instituto Geográfico Nacional ha registrado un terremoto de 2,8 grados en la escala de Richter con epicentro en el municipio malagueño de Campillos. 

El sismo ha tenido lugar al filo de las ocho de la mañana y ha sorprendido a muchos vecinos cuando estos aún se encontraban descansando en la cama. La profundidad del temblor ha sido de tres kilómetros y según informa el Servicio de Emergencias 112 de Andalucía, no constan daños materiales ni personales debido al suceso. Sí que informan de que han recibido varias llamadas de alertantes que aseguraban haber notado como la tierra temblaba. 

El pasado 15 de mayo se registraba otro pequeño terremoto muy cerca de Casares. Según informaron, este movimiento de tierra fue percibido por vecinos del propio municipio de Casares, pero también de Estepona y localidades gaditanas como La Línea de la Concepción o Algeciras. 

Qué hacer ante un terremoto

Como medida de prevención, antes de que ocurra un terremoto, siempre podemos curarnos en salud y retirar los objetos que determinemos que puedan convertirse en un peligro en caso de un temblor como lámparas, espejos o cuadros que puedan caernos encima. También es fundamental saber dónde y cómo se cierra el gas, el agua y el paso de la electricidad, en caso de que fuese necesario. Así, desde el IGN reconoce que siempre está bien tener en casa reservas de comida y agua potable para al menos tres días.

Durante, lo mejor es mantenerse tranquilo y permanecer en interior mientras dure el terremoto. Es fundamental tirarse al suelo y cubrirse, quizá bajo una mesa o escritorio resistente agarrándonos con ambas manos a alguna pata. También es clave alejarse de espejos, ventanas o puertas exteriores. En caso de no tener cerca una mesa, es válido también agacharnos con la cara y la cabeza cubiertas con nuestros brazos.

A posteriori, cabe recordar que es muy probable que se produzcan réplicas, sobre todo si el sísmo ha sido muy potente. Si el lugar donde estábamos durante el movimiento ha quedado dañado, es mejor marcharnos cuanto antes ante la posibilidad de esa réplica.