
Panel de la bolsa de Madrid
Terminamos un primer trimestre, tal como en cierto modo se preveía, de cierta volatilidad. Los mercados de renta variable en Estados Unidos han sufrido correcciones. El S&P 500 se deja en el trimestre un -4,59%, mientras que el Nasdaq cae un -10,42%. Estos retrocesos, tras dos años de intensas subidas, son esperables e incluso sanos. Los mercados nunca suben de forma lineal.
Sin embargo, Europa, contra el pronóstico de la mayoría de los inversores, ha tenido un comportamiento muy alejado del de Estados Unidos. El Euro Stoxx 50 sube en el trimestre un +7,20%, mientras que el Ibex 35 lo hace en un +13,29%. La razón “oficial” está en el mejor sentimiento europeo ante los planes de gasto en infraestructuras y defensa aprobados en algún país relevante como Alemania.
Sin embargo, creo que la verdadera causa ha sido que durante años Europa se ha comportado peor que la bolsa americana, estando la mayoría de los inversores sobre ponderados en el mercado americano e infra ponderados en el viejo continente. Ahora, ante la posibilidad del fin de la guerra de Ucrania y de los citados estímulos en defensa e infraestructura europeos, se ha producido un cierto giro de los inversores hacia los mercados europeos (que cotizaban a múltiplos mucho más baratos).
La pregunta es si esto va a continuar, y creo que la respuesta es que no, al menos no durante mucho tiempo. Estados Unidos y las empresas que cotizan allí siguen siendo de altísima calidad, y aunque la bolsa europea sigue más barata que la americana, parte del diferencial se ha corregido. Además, la economía europea se muestra menos dinámica que la estadounidense y es complicado que esto cambie, a no ser que Europa haga reformas estructurales y de gran calado.
En el trimestre, los bonos europeos también han visto cómo subían sus rentabilidades (y caían sus precios), una vez más contra pronóstico. Por ejemplo, el bono alemán a 10 años comenzó 2025 con un retorno del +2,36% y terminó en el +2,74%. A principio de año muchos inversores apostaban por comprar bonos con mayor vencimiento (alargar duraciones en la jerga de la gestión de carteras) ya que la senda del BCE era clara hacia bajadas de tipos de interés. Sin embargo, la previsión de mayor gasto público ha tensionado los bonos a largo plazo en Europa.
En el trimestre, los bonos europeos también han visto cómo subían sus rentabilidades (y caían sus precios), una vez más contra pronóstico
No obstante, el asunto clave del trimestre y lo que ha provocado correcciones en la bolsa americana, ha sido la situación geopolítica y, concretamente, la denominada “guerra comercial”. La posibilidad de caer en recesión en Estados Unidos es algo que aún vemos alejado, pero sí podemos afirmar que la incertidumbre no es buena para la economía, y los incrementos de aranceles no son buenas noticias. Cómo va a terminar la citada “guerra comercial” es algo que nadie conoce.
Lo que sí podemos intuir, de una manera razonable, es que el escenario central es que se lleguen a acuerdos comerciales que suavicen mucho el impacto económico. En la mayoría de estos eventos (como en el referéndum del Brexit en 2016) el escenario de cola raramente se cumple.
Además, el incremento de aranceles (que es lo que más preocupa al mercado actualmente) puede llevar a un incremento de costes de las empresas, que a su vez se trasladen al consumidor, generando inflación. Precisamente esto es lo que ha provocado que la senda de bajadas de tasas de interés no esté tan clara como a principios de año.
Recordemos que las reducciones de tipos, junto con los buenos resultados empresariales, son la clave para que las bolsas sigan su senda alcista.
Precisamente, sobre los resultados empresariales, y sobre la economía, soy cautelosamente optimista. Creo que la recesión es un escenario poco probable.
En bolsa, por ejemplo, las expectativas de los inversores son ahora mucho menores, y cualquier mejora (por ejemplo, una moderación de la “guerra comercial” o bajadas de tipos en Estados Unidos) serán bien recibidas. Por otra parte, las valoraciones son ahora menos exigentes que hace unos meses en Estados Unidos (los precios de las acciones han bajado mientras los beneficios han seguido subiendo). Sin duda, el mercado ofrece oportunidades en el entorno actual.
Son momentos de cierta volatilidad, de cierta incertidumbre, es necesario ser prudentes, pero también es imprescindible no dejarse guiar por el ruido a corto plazo de la geopolítica. Es necesario mantener la calma y, sobre todo, mantener una visión largoplacista.
*** Rafael Hurtado Coll es director de inversiones y de estrategia de Allianz Soluciones de Inversión AV.