Nuevas viviendas construidas bajo el compromiso con la sostenibilidad
En el contexto actual, con los mercados a la expectativa de los nuevos aranceles de Trump con caídas considerables en las Bolsas mundiales, el auge de las energías renovables, los materiales innovadores y los métodos de construcción sostenibles sigue su curso. Están siendo cada vez más empleados por las empresas e industrias, y suponen un gran cambio para el sector tanto a nivel regional como global.
Hay que tener en cuenta que la construcción de grandes infraestructuras sostenibles conlleva una evaluación exigente y una gestión eficiente de los riesgos ESG, yendo más allá del cumplimiento de la normativa técnica con el fin de promover impactos positivos en aspectos ambiental y social. Este enfoque en la construcción se inicia desde su planificación y diseño hasta su finalización, seguido de la operación y mantenimiento, dado que estas fases son clave para que la construcción sea ambientalmente sostenible.
Estos nuevos recursos que se demandan también conllevan incógnitas, que van más allá de las meramente geopolíticas. Así, las empresas inversoras y responsables de proyectos energéticos (parques eólicos flotantes, plantas fotovoltaicas marítimas, etc) están a su vez apostando por materiales y métodos aún desconocidos como son el biometano o el hidrógeno verde, con la finalidad de generar energías limpias y acercarse así al cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) marcados por las Naciones Unidas (ONU).
Por ello, los riesgos asociados suponen un desafío tanto para las compañías como para las aseguradoras que cubren estos proyectos. En España, por ejemplo, tal y como se anunció en noviembre del pasado año en el III Congreso Eólico Marino, Canarias acogerá el primer parque eólico marino flotante del país. Cabe mencionar el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima a 2030 que el Gobierno actualizó en septiembre de 2024, donde se incrementó el peso de las renovables hasta el 48% del consumo final de energía (alcanzando un 81% de la electricidad).
Las estadísticas de la ONU en términos de producción de energía son irrefutables. El organismo asegura que la producción de energía es la principal fuente de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI), pues de ella procede el 86% de las emisiones de CO2 de todo el planeta. Además, vale la pena destacar que más de una cuarta parte (26%) de todas las emisiones GEI proceden de la construcción y el entorno construido.
Las empresas inversoras y responsables de proyectos energéticos están a su vez apostando por materiales y métodos aún desconocidos como son el biometano o el hidrógeno verde
Así, se prevé que la industria de la construcción ecológica enfocada a las energías renovables crezca considerablemente los próximos años, pero debemos tener en mente que este proceso de descarbonización implicará múltiples medidas de cambio.
¿Cómo evalúan las compañías aseguradoras los riesgos asociados a estos nuevos retos?
Es complejo calcular correctamente los riesgos en regiones del mundo inhóspitas, así como en proyectos con estrategias, materiales y técnicas que apenas se han puesto en práctica anteriormente. Las consecuencias pueden ser muy desconocidas, por ello las aseguradoras están adaptando sus enfoques y desarrollando nuevas formas de evaluar y mitigar los riesgos asociados.
Aparte de las innovaciones tecnológicas de estos proyectos, también preocupan las condiciones en los que estos se construyen. Los nuevos riesgos meteorológicos impulsados por el cambio climático, como tormentas más intensas, inundaciones repentinas, sequías prolongadas y cambios bruscos de temperatura son cada vez más imprevisibles y pueden causar daños significativos e inesperados a las infraestructuras generando pérdidas económicas considerables.
A día de hoy el cambio climático marca la evolución del sector de la construcción y hay una lista de factores extensa a tener en cuenta, independientemente de las ideologías políticas. Por ello entre todos debemos poner nuestro granito de arena y seguir impulsando las construcciones sostenibles y los ODS a nivel global, pues constituyen indudablemente el futuro.
***Clara López es responsable de Construcción para Iberia en Allianz Commercial.