Las agresiones a profesionales sanitarios se duplican desde la irrupción de la Covid

Aunque la mayoría de denuncias son por insultos y amenazas, las agresiones físicas no se quedan atrás. El año pasado se registraron un total de 2.946 actos violentos. Así, lo reflejan los datos del último informe del Ministerio de Sanidad sobre Agresiones a Profesionales Sanitarios del Sistema Nacional de Salud (SNS) en 2024.

Esto refleja una tendencia creciente. En comparación con el ejercicio anterior, han aumentado los ataques un 15,74% (se registraron 14.749 en 2023). El perfil mayoritario de los agredidos corresponde a mujeres, predominando las notificaciones (edades 35-55 años) principalmente del personal facultativo y de enfermería.

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El 56% de esas agresiones se produjeron en centros de salud. Es decir, se notificaron un total de 46,43 ataques por cada 1.000 habitantes, mientras que un 44% de ellas fueron en hospitales. En concreto, un registro de 15,31 casos por cada 1.000.

Tal y como se refleja en el informe, la tasa de notificación de agresiones es tres veces superior en Atención Primaria que en los hospitales.

Causas

Entre las causas más frecuentes se encuentra "la atención percibida por el usuario y las relacionadas con las demandas del paciente, seguidas de otros motivos ajenos, como puede ser las largas listas de espera en la sanidad pública", aclara Virginia Izura, vicesecretaria de la Organización Médica Colegial (OMC) al Observatorio de la Sanidad.

Con todo, Sanidad precisa en el informe que una de las causas de esta tendencia al alza de agresiones es una mayor concienciación de los profesionales de la salud, además de que actualmente existe un registro que almacena estas denuncias. Y también por la mayor receptividad y respaldo tanto de las administraciones central y autonómicas, como de las fuerzas y cuerpos de seguridad y organizaciones colegiales.

"El aumento de las denuncias también ha contribuido a dar visibilidad a esta situación, ya que muchas de estas situaciones no se hacían efectivas previamente a la existencia de campañas divulgativas y de concienciación llevadas a cabo en los últimos años", expresa Sanidad.

Según asegura el Ministerio, es probable que sólo una parte de las personas que realizan su actividad laboral en los sistemas sanitarios autonómicos denuncie las agresiones. Existirán numerosos incidentes violentos que no se comunican.

Por especialidades

Como ya contó este periódico, en 2024 se registró un récord de agresiones a médicos con un total de 847 actos. Las regiones de Cataluña, Cantabria y Ceuta son las que más denuncias acumulan. Sin embargo, hay un montón de zonas "en las que no se notifican estos actos delictivos por miedo a las represalias", añade Izura.

Las enfermeras anotan un total de 2.525 agresiones, según los últimos datos del Observatorio de Agresiones del Consejo General de Enfermería (CGE) proporcionados a este medio. Lo que supone que cada día se producen siete ataques a estos profesionales en nuestro país. Por su parte, las regiones que más agresiones han notificado son Andalucía, Baleares y Castilla y León.

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Sin embargo, para el Ministerio de Sanidad esa cifra alcanza las 4.417, "lo que demuestra que es preciso mejorar la forma de registrar estos incidentes", detalla Diego Ayuso, secretario general del CGE y director del Observatorio de Agresiones de la entidad.

"Debe haber una mayor coordinación en el acceso a los datos. Los servicios de salud registran las agresiones que se producen pero sólo en el ámbito público. La sanidad privada también debería notificar los incidentes y trasladarlos tanto al Ministerio de Sanidad como a los colegios profesionales", continúa Ayuso.

Plan nacional

Hasta ahora, hay cuatro comunidades autónomas (Castilla y León, Castilla-La Mancha, Navarra y recientemente también Galicia) que han creado una ley para poner coto a las agresiones sanitarias.

Sin embargo, desde la OMC reclaman a Sanidad "la elaboración de una ley de agresiones estatal (después de que no saliera adelante el pasado mes de febrero) o la creación de un plan nacional que unifique estas penas y sanciones contra quien efectúa una agresión", demanda la vicesecretaria de la OMC.