La compañía ferroviaria Renfe ha adjudicado a Ferrovial Servicios con carácter de “extrema urgencia” el contrato para la prestación del servicio de atención a bordo y restauración en trenes de Renfe Viajeros para los próximos cinco meses. Un contrato con el que parchea por segunda vez la licitación del ‘macrocontrato’ (cercano a los 500 millones) para operar estos servicios, aplazado ahora a junio de 2021. 

“Es la prórroga durante cinco meses de los servicios a bordo que se vienen prestando, a la espera de que a mitad de año se adjudique el nuevo contrato”, señalan a Invertia fuentes de la compañía ferroviaria. Es decir, pone como plazo junio, mes en el que se espera que los servicios que presta Renfe se restablezcan. Eso sí, “dependerá de la evolución de la pandemia”, avisan. 

El contrato fue licitado el pasado 4 de febrero por 13,6 millones de euros (impuestos incluidos), según la plataforma de contratación del sector público.

Supone el segundo acuerdo alcanzado entre Renfe y Ferrovial para prorrogar estos servicios que se están ofreciendo en los trenes de Renfe de forma limitada. El primer acuerdo, alcanzado el 30 de abril, permitió prorrogar hasta el 31 de enero este contrato (nueve meses).

De hecho, las condiciones quedaron muy alejadas de las que recogía el contrato anterior debido a las restricciones generadas por el coronavirus y a la caída de la demanda de viajeros que aun no se ha restablecido desde que comenzó la pandemia.

Además, Ferrovial se comprometió a modificar y reajustar el servicio que presta para adaptarlo a la situación actual. "Restauración no se presta, pero los servicios a bordo se están prestando en un formato adaptado a la situación generada por la pandemia", apuntan a Invertia desde a empresa pública. 

Así se han encargado de realizar otras tareas como la asignación de las plazas, información y atención a los viajeros debido a las restricciones para servir comidas en los trenes. Cabe recordar que las cafeterías del AVE siguen sin estar abiertas. 

Macrocontrato

El acuerdo, además, tenía el objeto de salvar el empleo de los 2.000 trabajadores del grupo que prestan el servicio a los viajeros a bordo de los trenes AVE a través de un contrato que vencía a finales de abril. Con las prórrogas, cerca de 500 trabajadores salieron del ERTE en el que estaban inmersos para prestar este tipo de servicios. 

El tan esperado contrato de restauración es uno de los de mayor cuantía de Renfe, valorado en 493,4 millones de euros, según los pliegos de licitación del contrato que la operadora lanzó en julio de 2019.

No obstante, la situación de la Covid ha cambiado mucho las condiciones y la última adjudicación, dividida en dos lotes, no llegó a hacerse efectiva. Además, el precio podría ser muy inferior, según fuentes del sector consultadas por este medio. 

Estos servicios a los pasajeros a bordo de los trenes, en situaciones normales, incluyen la atención y despedida de los viajeros hasta la prestación de la restauración en bandeja en el asiento, servicio de cafetería, las máquinas expendedoras, el servicio de megafonía y la distribución de prensa y auriculares, entre otros servicios. 

Cabe recordar que todos estos servicios se vieron interrumpidos a partir del 14 de marzo tras decretarse el estado de alarma. De hecho, ni tan siquiera las frecuencias de alta velocidad se han reactivado al 100% (están al 50%, según la empresa ferroviaria) y servicios como el tren hotel tampoco se han retomado. 

Desde 2013, Ferrovial es la empresa que viene prestando el servicio de restauración de los trenes de la empresa ferroviaria con personal propio. En 2017 fue prorrogado por dos años más y, ahora, fruto de la Covid, vuelve a prorrogarse con carácter de “extrema urgencia”.